El ejercicio como herramienta para mejorar el bienestar físico y mental ha desbancado a objetivos puramente estéticos. Perder peso, por tanto, ya no es una tendencia tan vinculada a la práctica deportiva como sucedía hace años, según revela Liz Andrews, managing director en España y Portugal de Urban Sports Club. Ahora se persigue mejorar la salud convirtiendo el ejercicio en un hábito.
Pero además se busca conocer más el cuerpo, según se desprende de la encuesta del Colegio Americano de Medicina Deportiva (ACSM, por sus siglas en inglés), que cada año revela lo que más interesa en el ámbito del fitness. Repasemos algunas de las claves…
La fuerza gana peso
Una mayor y mejor información sobre la importancia del entrenamiento de fuerza ha desterrado falsos mitos en torno a la hipertrofia y el aumento de la masa muscular, especialmente en el caso de las mujeres, y ha demostrado que, tal como recuerda Andrews, es esencial para la longevidad, aumenta el rendimiento cognitivo, ayuda a prevenir lesiones y mejora la calidad de vida. «Está demostrado que el entrenamiento de fuerza ayuda además a perder peso: más masa muscular lleva a un aumento del metabolismo y este a su vez da lugar a un gasto energético más eficiente», precisa.
En este sentido, Juan Gómez y Ana de la Peña, entrenadores personales de Yoofit explican que hace cinco años era más bien raro ver a gente practicando ejercicios como el ‘hip thrust’. Sin embargo ahora se ha convertido en un básico para todos aquellos que quieran poner el foco en el trabajo en el glúteo. «El mensaje de ‘entrenar fuerza no te pone enorme sino que depende de muchos otros factores’ ha calado bien en la sociedad y cada vez es más común ver a powerlifters y personas interesadas en el trabajo de fuerza», explican.
La actividad que más interesa, según apuntan los informes de tendencias, es el entrenamiento funcional, que está orientado a la mejora de la fuerza, la optimización del equilibrio, la coordinación y la resistencia con el objetivo de facilitar el día a día cotidiano.
Pero sin duda el que ha vivido un ascenso meteórico con respecto a 2022 es el entrenamiento con pesos libres (barra, mancuernas, kettlebells, balones medicinales, etc…). También despiertan interés en España los entrenamientos personales en grupos reducidos. Actividades como la calistenia y el CrossFit gozan de gran aceptación. «Cada día somos más conscientes de que entrenar en grupo ayuda a engancharse más a una actividad», apuntan J En definitiva, se demanda más libertad de movimiento y menos uso de máquinas al trabajar la fuerza.
Personalización y adaptabilidad
La tabla de ejercicios estándar tiene los días contados. «Ahora se busca la adaptación del entreno a las necesidades específicas para evitar lesiones y para mejorar el rendimiento », revelan en Yoofit, donde aseguran que el cliente desea que se conozcan los aspectos relevantes de su vida para aumentar la conexión y el compromiso. Una tendencia destacada en este sentido es la búsqueda de entrenadores personales cualificados y certificados oficialmente.
El cuidado de la alimentación es fundamental para mejorar el rendimiento deportivo.Necesario vínculo con la nutrición
El asesoramiento nutricional y el deportivo irán de la mano pues se sabe que la actividad física por sí sola no tiene el mismo impacto que una solución que tenga en cuenta ambos lados de la ecuación del equilibrio energético. Así, según comenta la experta de Urban Sports Club lo ideal sería que se buscase asesoramiento en aplicaciones que ofrecieran soluciones para ambas cosas en lugar de tener que recurrira aplicaciones separadas para cada una de ellas.
Higiene postural y movilidad
El estilo de trabajo, con horas y horas sentados frente al ordenador, hará necesario el trabajo de movilidad orientado a aumentar el rango de movimiento de los músculos para reducir el dolor de espalda y de las articulaciones. Según la experta de Urban Sports Club, este tipo de entrenamiento previene lesiones, aporta un mejor control físico, mejora la autoconfianza y protege frente al efecto del envejecimiento. Asimismo desarrolla un mejor control físico, una mayor amplitud de movimiento para las actividades habituales de la vida diaria, un mayor sentido de la autoeficacia y una mayo protección frente a las fuerzas de la gravedad a medida que envejecemos. «Cuanto menos nos movemos, más se encoge nuestro mundo y más rápido perdemos el sentido de nosotros mismos y la calidad de vida», argumenta Andrews.
Comparten esta opinión los entrenadores de Yoofit para quienes la salud postural es la clave en cualquier actividad física que se practique. De hecho, según explican, cada día se crean más actividades exclusivamente enfocadas a cuidar la espalda y tener una correcta higiene postural. «Somos seres hechos para estar en continuo movimiento y llevar un vida esencialmente sedentaria hace que se creen malos hábitos y que eso nos lleve a tener dolores que nos avisan de que hay que actuar», comentan. Una de las conclusiones a las que llegan los expertos en este sentido es que la actividad física debe incluirse como prioridad en la prevención y no como respuesta tardía al dolor. «Prevenir es la llave maestra», sentencian en Yoofit.
Fitness a edades avanzadas¡Se buscarán programas dirigidos a personas por encima de la edad de jubilación, supervisados por profesionales y adecuados a sus características para que resulten seguros. Este grupo de usuarios demandará cada año una atención mayor conforme a su creciente relevancia demográfica.
En este perfil de usuarios, según explican en Yoofit, existe ahora una mayor preocupación por no perder las aptitudes físicas que siempre han tenido. Y en el caso de que arrastren lesiones antiguas, priorizan recuperar esa movilidad perdida.
Tecnología y ‘wearables’
La tecnología portátil, las pulseras de actividad y los relojes inteligentes serán cada día más populares, tanto para almacenar datos biométricos como para mejorar el rendimiento. «Ver los resultados en tiempo real puede ser una verdadera motivación (contar los pasos, la frecuencia cardíaca en reposo, las calorías quemadas, la distancia recorrida, los kilos perdidos…) para ser más activos», explica Andrews. Además, la gamificación ayudará a captar la atención de los más jóvenes y motivará a hacer ejercicio a los más sedentarios, según añade la experta de Urban Sports Club.
En opinión de los enrenadores de Yoofit la tecnología ya es un soporte vital dentro de cualquier ámbito. «Dentro del fitness nos ofrece la oportunidad de llegar más a la persona, poder reservar plaza, visualizar mensajes instantáneos sobre novedades del gimnasio y sentirse más unido a la comunidad y al propio centro lo que permite que el seguimiento sea continuo y sea más sencillo acceder a datos como el rendimiento, la evolución, el peso, porcentaje de grasa, de masa muscular… y así compararlo con otras mediciones…». En definitiva, según extos expertos, el uso de apps y wearables abre un amplio abanico de oportunidades para hacer más cómodo el camino hacia la salud.