Tengo devoción por los panes planos. Cuando uno se adentra en la cocina sin glúten se da cuenta de cuántas preparaciones nos podemos encontrar en la gastronomía internacional que nos ayudan tremendamente y nos pueden inspirar para preparar y comer pan de otra forma. Aunque el pan tenga para muchos la consideración de alimento básico y sea un auténtico quebradero de cabeza para alguien con la condición de celíaco, podemos encontrar alternativas simples elaboradas con ingredientes incluso más nutritivos con los que podremos saciar nuestras ganas de acompañar las comidas con «algo» más.
Ingredientes
Patatas rojas
900 gramos
Yogur griego (en la receta original se usa nata)
¼ de taza
Mantequilla ablandada
1 cucharadita
Sal
1 cucharadita
Harina de trigo sarraceno
175 gramos
Mi recomendación principal: No caigáis en la obsesión de pretender obtener un pan con la apariencia, sabor y textura de pan con gluten, en una versión sin gluten, si estas no tienen ingredientes interesantes. En las secciones sin gluten existen opciones de tan mala calidad que os recomiendo apostéis por incluir este tipo de preparaciones sencillas y con pocos ingredientes, que en la mayoría de los casos basadas en vegetales,granos integrales, semillas o frutos secos.
En Noruega pocos platos son más apreciados que el lefse. Estos panes delgados de patata se sirven calientes y aunque el acompañamiento tradicional es con mantequilla y azúcar, yo los encuentro perfectos para rellenar con lo que más nos guste para comer, o también incluir en el desayuno.
La receta del lefse.Existen diferentes formas de prepararlos, la versión más rápida es la que sigue:
Preparación
Pelar las patatas, asegurándose de que no queden cáscaras ni ojos. Trocearlas y cocerlas en una olla, poner agua a hervir y añadir las patatas. Hervirlas hasta que estén tiernas, entre 15 y 20 minutos.
Escurrir bien las patatas hervidas y pasarlas por un pasapurés. Añadir la mantequilla y dejar enfriar. Podemos meter la mezcla al frigorífico convenientemente tapada y dejarla reposar toda la noche, lo que la endurecerá.
Al retirarla, añadir la sal, el yogur y la harina. En la receta original se incorpora una cucharada de azúcar que es opcional y tampoco altera en mucho los valores nutricionales finales. Mezclar muy bien hasta obtener una masa suave y ligeramente pegajosa.
Dar forma al lefse cortando la bola de masa en porciones de igual tamaño. Mientras, iremos precalentando una crepera o sartén antiadherente. Hacer una bola con cada porción, colocar entre dos láminas de papel y aplastar con la ayuda de una tabla o superficie plana hasta conseguir una forma circular y plana. Espolvorear con un poco de harina si vemos que está demasiado húmeda.
Cuando la sartén esté caliente, pincelar con una pequeña cantidad de mantequilla y/o aceite de oliva, retirar el papel superior de la masa y dar la vuelta a nuestro lefse sobre la sartén, retirando el papel que antes estaba debajo.
Cocine el lefse en la plancha hasta que empiecen a aparecer manchas marrones. Darle la vuelta y cocinar el otro lado. Sacar el lefse y colocarlo sobre un paño limpio. Continuar cocinando las bolas de masa restantes hasta que hayamos utilizado toda la masa.
Servir el lefse aún caliente con el relleno dulce o salado que os apetezca. Solo nos queda disfrutar.
Cómo conservarlo:
El lefse se puede conservar en recipiente hermético en el frigorífico no más de 4 días.
También lo podemos congelar pero siempre y cuando ya estén cocinado. No es recomendable refrigerar ni congelar la masa sin cocinar. Cuando vayamos a consumirlos, los dejaremos a temperatura ambiente y a continuación los calentaremos rápidamente en la plancha justo antes de servirlos. También podemos usar el microondas para este fin, unos 15 segundos por pan son más que suficientes.
Variación de la receta:
– La receta se puede perfeccionar secando la patata recién cocida y escurrida metiéndola en el horno durante unos 15 minutos a 180ºC.
– Además del yogur, la leche evaporada también puede sustituir a la nata espesa.
– Utiliza atún, pollo, aguacate o huevo cocido para una comida rápida.
– Úntalos con queso crema y añade frutos rojos, también están deliciosos con crema de cacahuete, plátano o un poco de chocolate 80% derretido.