El jengibre es una de nuestras especias favoritas entre todas. Su sabor exótico y delicioso le confieren versatilidad y facilidad de uso en la gastronomía. Podemos preparar un sinfín de platillos con esta increíble especia, que ha ganado un lugar especial en el corazón de chefs y de todos aquellos que disfrutamos de cocinar. Pero no sólo la queremos por su gran sabor, sino que también es un ingrediente con amplios beneficios para nuestra salud, especialmente a la hora de incorporarlo en nuestra rutina diaria.
Por ejemplo, tomar agua de jengibre con frecuencia puede hacer maravillas. Se trata de una especia y medicina ancestral, originaria de del sudeste asiático, ha sido utilizada por mas de 2000 años, gracias a sus propiedades antiinflamatorias y antioxidantes, de acuerdo con varios estudios publicados por el National Center of Biotechnology Information (NCBI) de los Estados Unidos en los cuales nos explican que el jengibre contiene un componente bioactivo llamado gingerol, al cual se le adjudican numerosas propiedades medicinales incluyendo las antiinflamatorias y antioxidantes.
Otros beneficios que tiene el consumo de jengibre son:
Ayuda a tratar muchos tipos de náuseas, sobre todo, las matutinas
Reduce el dolor muscular y las molestias. Un pequeño estudio también mostró que las personas que tomaban suplementos diarios de jengibre tenían menos dolor muscular después de hacer ejercicio.
Sus efectos antiinflamatorios ayudan a la autoconcervación natural del cuerpo. Los gérmenes, los productos químicos y la mala alimentación pueden causar demasiada inflamación y dañar el cuerpo, y el jengibre es perfecto para recuperarlo.
Por estas mismas características antiinflamatorias, es un gran aliado para reducir las reacciones alérgicas en la piel.
Disminuye los niveles de azúcar en la sangre de forma drástica y mejorar los factores de riesgo en cardiopatías
Es un gran aliado para prevenir y tratar resfriados.
Ayuda a prevenir la indigestión crónica, ya que es un poderoso digestivo. Tomado con regularidad puede ayudar a combatir la indigestión, los vómitos y las náuseas.
El jengibre reduce los dolores menstruales, así que una tacita de té de jengibre bastará para combatir los molestos cólicos.
Ayuda a mantener bajos los niveles de colesterol.
Cuando se combina con una dieta saludable y con ejercicio, el agua de jengibre puede ser una excelente aliada a la hora de perder peso.
Mejora la función cerebral y protege contra el Alzheimer
Es un antiséptico natural contra las infecciones.
Comienza lavando y pelando el jengibre con un pelador.
Coloca el agua en una jarra, agrega las 4 rodajas de jengibre y el jugo de dos limones. Licúa bien y cuela. Endulza con miel o algún tipo de edulcorante de tu preferencia. Sirve bien frío.
