Uno de los clásicos de cualquier gimnasio es el de preguntar por el ejercicio que tenemos que hacer para cambiar aquello que no nos gusta de nosotros mismos. Ese objetivo personal puede ser muy variado, igual no te gusta cómo se disparan tus pulsaciones si subes por unas escaleras, o que algunos michelines indeseables te den un aspecto físico con el que no estás muy conforme. No hay límite ni clasificación a los objetivos de cada ser humano.
Cualquier entrenador puede confirmar lo complejo que es responder a la pregunta «¿qué ejercicio tengo que hacer para quitarme esta tripa?», sin tener que dar una explicación que la mayoría de las personas no quieren escuchar. Los ejercicios no son medicamentos que… Ver Más