Vialidad: reforzarán la presencia policial en el Palacio de Justicia y en Comodoro Py por el fallo en el juicio contra Cristina Kirchner

El Palacio de Justicia y los tribunales de Comodoro Py tendrán mañana una mayor custodia, debido al fallo que comunicará de manera virtual el Tribunal Oral Federal N°2 en la causa contra Cristina Kirchner y otros acusados conocida como Vialidad. La Policía Federal reforzará su presencia en los dos edificios y coordinará su despliegue con la Policía de la Ciudad.

La Policía Federal -que está en la órbita del Ministerio de Seguridad, que conduce Aníbal Fernández- tiene a cargo la custodia de los dos edificios en los que mañana se aumentará la dotación. El número de efectivos que incluirá el despliegue se mantiene en reserva, aunque fuentes al tanto del procedimiento aclararon a LA NACION que “siempre hay más efectivos que los que se muestran”.

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En el Palacio de Justicia están los jueces de la Corte Suprema, blancos usuales de las críticas del kirchnerismo duro; en Comodoro Py, los magistrados Jorge Gorini, Rodrigo Giménez Uriburu y Andrés Basso, que dictarán el fallo en el juicio oral por el caso Vialidad.

El Palacio de Justicia tendrá custodia reforzada ante el fallo por el caso Vialidad (LUIS ROBAYO/)

La Policía Federal tiene a cargo el interior de los dos edificios; en las adyacencias se desplegarán efectivos de la Policía de la Ciudad. Los ministerios de Seguridad nacional y porteño coordinan el despliegue. En Comodoro Py ya se dispuso un vallado, a la espera de posibles manifestaciones que se produzcan antes o después del fallo. Las vallas están sobre los accesos al edficio, tanto los del frente como los laterales y los posteriores.

En el interior del edificio de Comodoro Py la seguridad depende de la Policía Federal. Allí se reforzará el control de accesos desde la mañana, donde la policía chequea a los visitantes con un arco detector de metales y hace pasar los bolsos por un escáner.

A las 13.30 se cerrarán todas las entradas del edificio judicial, cuando termina el horario de atención al público.

Confían los funcionarios en que después de hora habrá menos gente que la habitual en el edificio judicial de Retiro y en el Palacio de Justicia, ya que hay convocada una huelga del sindicato que reúne a los empleados judiciales, de Julio Piumato, en reclamo de mejoras salariales.

En Comodoro Py, se mantendrá solo disponible la puerta principal para la salida de los empleados. Se calcula que el veredicto se leerá alrededor de las 17, cuando ya no queden empleados ni funcionarios en el edificio, excepto los jueces del tribunal oral federal y el fiscal Diego Luciani, que asistirá a la audiencia por Zoom.

Lo mismo ocurrirá con los acusados que escucharán el veredicto con sus abogados conectados a la plataforma virtual. En el caso de la vicepresidenta, lo hará desde su despacho en el Senado. Según pudo saber LA NACION, no se prevén medidas de seguridad especiales en el Congreso.

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Desde la administración de Horacio Rodríguez Larreta informaron a LA NACION que desplegarán agentes de prevención y policías, como se suele hacer en las manifestaciones, y que la cantidad dependerá del volumen que adquieran las marchas kirchneristas que se activen en caso de una condena contra la vicepresidenta.

El kirchnerismo no convocó masivamente, aunque ciertos sectores alineados con Cristina ya anunciaron que marcharán. Uno de esos grupos es el partido Miles, que lidera Luis D’Elía. Además, el secretario general de ATE-Capital, Daniel Catalano, anunció que van a “parar el Estado” si la vicepresidenta es condenada.

El despliegue de seguridad por los coletazos del juicio de Vialidad ya trajo inconvenientes. El 27 de agosto, el gobierno porteño instaló un vallado con custodia de la Policía de la Ciudad para evitar concentraciones en cercanías del departamento de Recoleta en el que vivía Cristina Kirchner y se produjeron incidentes con militantes kirchneristas que querían acercarse al domicilio de la vicepresidenta. Días después, el 1° de septiembre, se produjo el intento de magnicidio que protagonizaron Fernando Sabag Montiel y Brenda Uliarte.

 

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