El Cívitas BM Guadalajara ha jugado un buen balonmano pero no ha logrado detener el vendaval ofensivo del Fraikin Granollers, que se ha llevado esta tarde los dos puntos en juego en el Municipal David Santamaría (26-34).
En los primeros compases del encuentro la circulación del balón era muy rápida por ambos bandos, aunque eran los pupilos de Antonio Rama quienes aprovechaban mejor los fallos locales en el ataque de la primera línea alcarreña, lanzando contras letales hacia la meta morada, defendida hoy por Marco Krimer.
Antes de cumplirse los diez minutos de juego, el poderoso ataque catalán abría una brecha en el luminoso (4-8) que obligaba a Juan Carlos Requena, entrenador del Cívitas, a detener el crono por primera vez, para intentar cortar la racha del rival y dar instrucciones a sus jugadores.
Sin embargo, la defensa de Granollers era un muro impenetrable para el Guadalajara, que apenas inquietaba la portería de Granollers, más allá del lanzamiento exterior de Tito Díaz y Kemal Hamzić.
El ataque barcelonés, capitaneado por Antonio García y Esteban Salinas, no fallaba, lo que neutralizaba el colosal esfuerzo del Cívitas por acercarse en el marcador. Con todo, los mejores minutos de Marco Krimer bajo palos sirvieron para llegar al filo del descanso a tan solo un gol de diferencia (14-15), lo que motivaba a Antonio Rama a solicitar su primer tiempo muerto.
El Cívitas Guadalajara consiguió, a base de mucho trabajo, irse al descanso con una desventaja más que asumible para afrontar la segunda parte (14-16). Los alcarreños soñaban con la remontada, apoyados por el calor de su afición, que hoy llenaba el David Santamaría, pero el Granollers volvió a estirar el marcador y, con un 19-23 en el luminoso, obligó de nuevo a Juan Carlos Requena a solicitar tiempo muerto, para intentar desatascar la situación.
Entonces Granollers cometió algunos errores e imprecisiones, principalmente motivados por la inexperiencia de Bruno Reguart en la categoría.
Fue un espejismo, con seis goles abajo (19-25) Dani Santamaría sustituía a su compañero Marco Krimer bajo palos, aunque los alcarreños siguieron peleando cada balón y esforzándose por no irse del partido, la calidad del Fraikin Granollers se impuso sobradamente ante un Cívitas BM Guadalajara, que no pudo más que ver impotente cómo se escapaban los dos puntos de su casa, cayendo derrotados por 26-34.