Castigo durísimo para el FC Barcelona en el clásico de vuelta de semifinales de Copa del Rey contra el Real Madrid. Superior en la primer mitad, el cuadro de Xavi ha visto cómo su rival se llevaba un botín tremendo con un contraataque que ha derivado en el 0-1 de Vinicius. Muy cruel desenlace para un cuadro azulgrana que ha vuelto a demostrar que no aprende a levantarse de los golpes en las grandes citas.
El conjunto barcelonista ha salido totalmente grogui en la segunda mitad. Con las bajas sensibles y muy tocado anímicamente, el Barça ha visto cómo el equipo de Ancelotti lo barría. El 0-2 ha llegado en el 50′ por culpa de una pésima basculación del equipo en defensa que ha aprovechado Benzema.
METER LA PATA A DESTIEMPO
Y unos minutos después ha llegado el turno de una gran torpeza dentro del área de Franck Kessie. El marfileño estaba siendo el mejor del FC Barcelona. Una actuación que se ha visto emborronada por una fracción de segundo. La patada a destiempo que ha propinado a Vinicius y que ha derivado en el 0-3.
El africano ha metido la pata entrando de golpe al peor jugador con el que podía hacerlo. La pena máxima la ha convertido Karim Benzema. Inapelable para Ter Stegen.
