DOHA (Enviado especial).- En la tranquilidad que domina en la Universidad de Qatar, se rompió el equilibrio. Lo que parecía un camino sin problemas hacia los cuartos de final se transformó en un dolor de cabeza para el cuerpo técnico de la selección argentina. Otros de los emblemas de Lionel Scaloni sufrió un dolor intenso en el isquiotibial derecho y todo se transformó. Se encendieron las alarmas cuando Rodrigo De Paul se quedó mirando para uno de los costados de la cancha de entrenamiento en la Universidad de Qatar como sabiendo que algo malo había pasado.
Fue en una acción como tantas otras que se dan en los entrenamientos. Estaba pateando al arco cuando sintió un “pinchazo” en la pierna derecha. Inmediatamente le realizaron estudios y allí determinaron que lo mejor era no exponerlo, que debía comenzar con celeridad trabajos de kinesiología. Por eso en la última práctica, la penúltima antes del choque con Países Bajos, apenas salió al campo de juego se puso a realizar algunos movimientos con el kinesiólogo, Luis García. Pero es una posibilidad que se pierda el partido de este viernes a las 16 (las 22 locales), en el estadio Lusail.
Aunque jugó muy mal los dos primeros partidos, De Paul fue importante en los duelos con Polonia y Australia (Aníbal Greco/)
Ante este escenario, y teniendo en cuenta que se trata de unas de las piezas más importantes del equipo nacional, el hermetismo es absoluto. Nadie quiere arriesgar nada respecto de la situación de De Paul, aunque algunas voces indican que es más complejo de lo que se cree y que es muy poco tiempo como para que pueda llegar pleno al partido con Países Bajos.
Si bien el jugador le comunicó al técnico que quiere jugar y que hará cualquier esfuerzo, Scaloni ya fue claro en que no va arriesgar con jugadores que no estén en condiciones físicas. Lo sabe muy bien porque lo mismo ocurrió hace algunos días con Di María, que se perdió el encuentro de los octavos de final ante Australia, por una situación similar.
Como sea, este jueves la situación será evaluada con detenimiento, si existe alguna posibilidad de que pueda tener minutos ante los neerlandeses.
Este escenario no hace más que complicar toda la tarea de Scaloni, que en esta Copa del Mundo tuvo que lidiar con demasiados contratiempos: jugadores que llegaron con dolencias físicas, otros con poco rodaje. Además, en plena competencia, Cuti Romero dejó la cancha con un problema en un tobillo ante Arabia Saudita, Di María tuvo una sobrecarga tras el duelo con Polonia, Papu Gómez está entre algodones tras el juego con Australia y ahora De Paul está al límite de quedarse al margen del juego con Países Bajos.
Ahora bien, en la última práctica el entrenador volvió a buscar variantes, porque saber que no tendría a De Paul y que todavía no puede garantizar que Di María esté pleno para el cruce de cuartos de final. Por lo tanto, cambió su diseño y en el ensayo táctico dispuso este equipo: Emiliano Martínez; Nahuel Molina, Cristian Romero, Nicolás Otamendi, Lisandro Martínez y Marcos Acuña; Alexis Mac Allister, Leandro Paredes, Enzo Fernández; Lionel Messi y Julián Álvarez.
¿Romperá la tradicional línea de 4, cuando en todo el torneo dijo que su equipo seguiría jugando del mismo modo? Las urgencias podrían torcer esa máxima. Puede ser.
El único reemplazante natural para el puesto sería Exequiel Palacios, que es del gusto del entrenador y ya tuvo minutos en este Mundial. También puede ingresar Guido Rodríguez si desea reordenar el mediocampo. Pero ninguna de estas dos alternativas fueron ensayadas por ahora. Pero no se pueden descartar, porque el DT ya sorprendió con sus alineaciones en esta Copa del Mundo.
De Paul, el lugarteniente de Messi, en duda (Aníbal Greco/)
Esta noche volverían a realizarle estudios a De Paul, para ver cómo evolucionó de la sobrecarga. El entrenador, en este momento, cree que lo mejor será no arriesgarlo en la última práctica antes del partido. Es por eso que la determinación de qué equipo dispondrá Scaloni para este gran choque es muy probable que recién se sepa dos horas antes del encuentro, el tiempo que exige FIFA para dar la formación titular.
El entrenador fue muy claro con sus jugadores y allegados: no quiere que se filtre la información. Así como en la previa del partido contra Australia, cuando le pidió a Pablo Aimar que pase por la habitación de los jugadores para pedirles que eviten contarles a los familiares quiénes iban a jugar en ese partido.
Se acercan horas decisivas. La tensión va en aumento. Una lesión -siempre inoportuna-, instaló más dudas. La selección argentina tuvo el tiempo de descanso que esperaba para llegar en condiciones, pero un contratiempo vuelve a generar incertidumbre.
