Un lateral diestro se convirtió en el héroe de Costa Rica. Precisamente, uno de los más criticados tras el humillante 7-0 frente a España. Por sus errores en el césped y por asegurar, después, que no había sido “un partido fácil” para la Roja. Fuller estaba en ojo del huracán. Ya no. Su tercer gol en 33 partidos con la camiseta de los ‘ticos’, sin duda, será el que siempre recordará. “Se lo pedí mucho a Dios. Más que el gol, lo importante era sumar de tres”, aseguró tras la hazaña.
Lateral diestro, Keisher Fuller marcó con la zurda, para añadir más épica a todo. Recibió un medido pase al hueco de su compañero Yeltsin Tejeda, se la acomodó con la derecha y se inventó una inverosímil rosca que sorprendió al meta japonés Gonda. Más que un gol fue una rebelión, la de una selección que fue la última en clasificarse para el Mundial y la primera en recibir los palos más duros.
Un ‘currante’ del fútbol
“Lo de España nos dolió mucho, pero nos hemos repuesto. Pero ahora por ganar, no somos los mejores. Ni éramos los peores por perder. Ahora lo que tenemos que hacer, con miras al partido contra Alemania, es confiar en Dios y en cada uno de nosotros”, aseguró Fuller, muy religioso y con los pies en el suelo.
Nacido en Puerto Limón, Fuller, de 28 años, milita en el Herediano desde 2018. Toda su carrera deportiva ha transcurrido en su país. Saprissa de Corazón, Generación Saprissa, C.S. Uruguay de Coronado y Municipal Grecia fueron sus anteriores equipos. Un ‘currante’ del fútbol al que ya le ha llegado su tarde de gloria.
