MAR DEL PLATA.- Taxistas y remiseros redoblaron su apuesta con el reclamo contra el desembarco de las aplicaciones digitales de transporte en esta ciudad y, tras la medida de fuerza del martes pasado con cortes de calles en varios puntos céntricos, repitieron el paro a partir del mediodía y hasta medianoche, con presencia y reducción de calzada en los accesos por ruta 2 y 11, con lo que afectaron de manera directa y en particular a turistas que arriban en el inicio de este fin de semana.
A media tarde, cuando según fuentes de Aubasa -empresa concesionaria de este corredor vial- llegaban entre 500 y 700 automóviles por hora, el ingreso al último kilómetro de autovía se hacía casi a paso de hombre, en una única hilera, con vehículos flanqueados por un cordón policial para asegurar la circulación y manifestantes que repartían panfletos con críticas a las autoridades municipales.
La decisión se comunicó ayer por la tarde, en conferencia de prensa, en disconformidad por la falta de respuestas del municipio a un petitorio de cuatro puntos presentado a las autoridades locales. Piden que se desista de un proyecto de ordenanza para autorizar servicios como Uber y Cabify, exigen controles para detectar móviles de esas firmas que ya operan en la ciudad sin habilitación y que se hagan cumplir multas y otras sanciones para esos infractores.
“Es la opción que nos dejaron para visibilizar el reclamo que le estamos haciendo al municipio para que controle a servicios que no están habilitados y cese la publicidad que esas empresas hacen en vía pública”, señaló Donato Cirone, dirigentes del Sindicato de Peones de Taxis. La medida de fuerza culmina a las 24 y en próxima asamblea los gremios del sector determinará si habrá nuevas instancias de reclamo.
En conferencia de prensa, acompañado de concejales del oficialismo y poco antes de que se ponga en marcha esta nueva movilización de taxistas y remiseros, el intendente local, Guillermo Montenegro, advirtió que “sitiar a Mar del Plata durante el mejor fin de semana de la temporada es hacerle mal a la ciudad” y ratificó que “estos métodos se tienen que acabar”, además de advertir que “no se aceptarán el apriete, la actitud mafiosa y las extorsiones”.
Frente a la posible gravedad de la medida anunciada para este mediodía, que se extenderá durante 12 horas, aseguró que el municipio tomará “todas las medidas que correspondan” y anticipó que frente a hechos graves se aplicarán “multas y hasta suspensión” de licencias, tanto de taxis como remises.
Ante las molestias que prometía generar esta nueva protesta hubo ayer una convocatoria desde la Fiscalía General del Departamento Judicial Mar del Plata, que reunió al representante legal de taxistas; al secretario de Seguridad de General Pueyrredon, Martín Ferlauto, y a los fiscales general, Fernando Berlingeri, y de turno, Andrea Gómez.
Los funcionarios judiciales advirtieron allí que no tolerarán ninguna medida excesiva. “El que comete un delito se va con las esposas puestas”, advirtió Gómez, que será la responsable de evaluar la situación y tomar decisiones apenas la manifestación salga de cauces normales.
Los manifestantes se concentraron primero en el casco urbano y luego marcharon, en hilera, para ubicar sus vehículos sobre las banquinas de la ruta 2, a la altura del acceso al Aeropuerto. “Sobre el pavimento no”, remarcaban los dirigentes para evitar que la presencia de automotores bloquearan el paso.
La policía dispuso división de carriles con ánimo de dejar uno para la protesta y otro para el ingreso de viajeros. Poco a poco los manifestantes ganaron espacio sobre la calzada y, con la excusa de entregar panfletos a quienes llegaban a la ciudad, lograban interrumpir o al menos demorar el tráfico cada diez minutos. Desde el inicio de esta nueva jornada de reclamo no hubo incidentes.
En Mar del Plata hay casi 3000 unidades en actividad entre taxis, remises y autos rurales, todos habilitados por el municipio. Los dirigentes del sector, tanto propietarios de licencias como choferes, resisten que se autorice a aplicaciones digitales y propusieron que en caso de necesidad de ampliar el servicio se saquen al mercado nuevos permisos de taxis y remises para atender el crecimiento de la población y demanda.
Montenegro dijo esta mañana que el municipio está cumpliendo con los controles del transporte en todas sus variantes, situación que los protagonistas del reclamo niegan. “Hoy el problema es el método que eligen para reclamar, con corte de rutas, justo en el que puede ser el mejor fin de semana de verano”, dijo el intendente. El martes, cuando la movilización de los taxistas y remiseros trasladó sus protestas del casco urbano a la autovía 2, ya había anunciado por redes sociales la presentación de una denuncia penal contra los responsables del reclamo. “No vamos a aceptar extorsiones ni aprietes”, aseguró. La demanda la formalizó al día siguiente u secretario de Seguridad, Martín Ferlauto.