Mario y Luigi son conocidos por ser los fontaneros más famosos del mundo, pero ¿por qué esta profesión se convirtió en su sello distintivo en el universo de los videojuegos?
La historia comienza en 1981, cuando el personaje que ahora conocemos como Mario apareció por primera vez en el juego “Donkey Kong”. En ese entonces, el héroe se llamaba “Jumpman” y su profesión era carpintero/constructor. Pero todo cambió en 1985 con el lanzamiento de “Super Mario Bros”, el juego que revolucionó la industria y convirtió a Mario en el protagonista de su propia historia.
El creador de Mario, Shigeru Miyamoto, quería que su personaje rompiera con los estereotipos del típico fontanero extra que siempre moría en las películas de acción. En cambio, quería que Mario se convirtiera en el héroe de la historia, el protagonista principal y no un extra más.
Así, Mario se convirtió en fontanero, una profesión que encajaba perfectamente con su papel en el juego. A través de las tuberías verdes, Mario se adentraba en el Reino Champiñón para salvar a su amada Peach de las garras del malvado Bowser.
Desde entonces, Mario y Luigi han llevado su trabajo como fontaneros a lugares increíbles, desde el Reino Champiñón hasta el espacio exterior. Y aunque la profesión de fontanero puede parecer poco glamurosa, en manos de estos dos hermanos se convierte en la clave para salvar el mundo una y otra vez.
Pero a pesar de su profesión, Mario es mucho más que un fontanero. Es un héroe, un icono de la cultura pop y un símbolo de la creatividad y la innovación en el mundo de los videojuegos. Su carisma, su personalidad y su capacidad para superar cualquier obstáculo lo han convertido en uno de los personajes más queridos de todos los tiempos.
Este año, Mario ha llegado a la pantalla grande en una nueva película de Super Mario Bros, que se ha convertido en una de las más taquilleras de 2023. Una vez más, el fontanero más famoso del mundo demuestra que su profesión no es un obstáculo para convertirse en un héroe.