Las organizaciones sociales de izquierda nucleadas en la Unidad Piquetera (UP) cortaron la avenida 9 de Julio en protesta por la suspensión de casi 155.000 planes Potenciar Trabajo decidida por el Gobierno la semana pasada. Las columnas avanzaron desde el Obelisco hacia el Ministerio de Desarrollo Social para reclamar una reunión con la ministra Victoria Tolosa Paz. Ante la falta de respuesta, decidieron bloquear también los carriles del Metrobus, agigantando las demoras de tránsito en el centro porteño. Al caer la tarde, y sin conseguir que los recibieran, levantaron el bloqueo pero anunciaron que preparan nuevas medidas.
“No obtuvimos ninguna respuesta de la ministra, a la que le pedimos insistentemente una reunión desde hace una semana. El Gobierno sigue ratificando una política de ajuste y sometimiento al FMI. Por eso no atiende los reclamos populares, por eso da bajas, por eso ajusta a los que menos tienen. La Unidad Piquetera se reúne el lunes y va a profundizar el plan de lucha”, anunció Eduardo Belliboni, líder del Polo Obrero, al comunicar el levantamiento del corte.
“El Fondo condena. Tolosa condena. Cese de los 160.000 despidos”, era una de las consignas en las banderas de las organizaciones que se movilizaron al centro porteño, donde se destacaron las columnas del Polo Obrero y el MST Teresa Vive. También participaron manifestantes del Barrios de Pie, el FOL y el Frente Popular Darío Santillán, entre otros.
Marcha del Polo Obrero al ministerio de Desarrollo Social (Gonzalo Colini/)
Con cánticos hacia el presidente Alberto Fernández y la vicepresidenta Cristina Kirchner, la columna del Polo Obrero partió pasadas las 15 desde la esquina de Independencia y 9 de julio, para encontrarse frente a Desarrollo Social con el resto de las organizaciones, que comenzaron su marcha desde el Obelisco. Su llegada fue precedida y anunciada por bombas de estruendo.
“Existe un ajuste muy grande desde el año pasado, que ahora se ha potenciado con casi 160.000 personas que han sufrido la baja que se dieron por una cuestión de virtualidad”, dijo a LA NACION Belliboni.
Manifestación del Polo Obrero en el Obelisco camino al ministerio de Desarrollo Social (Gonzalo Colini/)
La semana pasada, el Gobierno anunció la suspensión de 154.441 planes Potenciar Trabajo. La ministra Tolosa Paz buscó alejar la idea de “ajuste” en el gasto social y hizo hincapié en que se trata de una “suspensión” y no una “baja” o recorte. En esa línea, desde explicaron que quienes tengan sus planes suspendidos es porque no revalidaron sus datos en una auditoría en la que el 89% de quienes reciben el beneficio sí hicieron la actualización de su información personal.
En total, conservan la ayuda estatal 1.210.571 beneficiarios, de los cuales la mitad son de la provincia de Buenos Aires. “A ellos les corresponde percibir porque sabemos perfectamente su situación patrimonial. El programa está transparentizado en un 88,7%”, indicó la funcionaria en una conferencia de prensa.
Manifestación del Polo Obrero en el Obelisco camino al ministerio de Desarrollo Social (Gonzalo Colini/)
La mirada de las organizaciones que protestan en la 9 de Julio difiere abiertamente. “No se trata de familias que salieron de su situación de pobreza o dejaron de cumplir los requisitos del programa, solamente no pudieron realizar la actualización de datos por internet. Por la falta de conectividad y de servicios básicos en pueblos y barriadas de todo el país, 160.000 personas en situación de extrema vulneración social van ver recortado su único ingreso de menos de $33.000 cuando la canasta básica para no ser pobre llega a $150.000 y la de indigencia a $67.000. Muchas personas afectadas son mujeres que son sostén de sus hogares”, alertaron desde Unidad Piquetera a través de un comunicado.
“Es una excusa para hacer una ajuste con los que menos tienen. Queremos que se suspendan estás bajas que se han dado y que se haga una revalidación presencial. Que sea el Estado el se mueva y vaya a buscar a la gente”, sostuvo Belliboni. El reconocimiento facial en la aplicación Mirgentina, la plataforma para efectuar la validación de datos, sería el principal obstáculo para completar el proceso, advierten.
Las organizaciones también reclaman que el Gobierno aumente el monto del programa para igualarlo con la canasta básica, “para que ningún trabajador esté por debajo línea de pobreza”.
Manifestación del Polo Obrero en el Obelisco camino al ministerio de Desarrollo Social (Gonzalo Colini/)