Después del terremoto acontecido tras la dimisión en bloque de toda la directiva, la Juventus se ha puesto rápido manos a la obra. La sociedad comercial Exor, propiedad de la familia Agnelli al igual que el club piamontés, ha dado las riendas del club a John Elkman, consejero delegado de la citada Exor. Elkman, primo de Andrea Agnelli, ya ha tomado las primeras decisiones.
Maurizio Scavino ha sido nombrado nuevo director general, mientras que Gianluca Ferrero es el nuevo presidente de la ‘Vecchia Signora’. El primero es el consejero delegado de la editorial Gedi, la cual prublica el periódico ‘La Reppublica’, mientras que el nuevo mandamás de la Juve es presidente del consejo directivo de varias empresas y vicepresidente de la junta directiva de Banca del Piemonte.
Se trata esta última de una elección “con vistas a la asamblea de accionistas convocada para el 18 de enero de 2023”; Ferrero ha sido escogido debido a “poseer una comprobada experiencia, las habilidades técnicas necesarias y una auténtica pasión por el club”.
Son unas selecciones claramente enfocadas a afrontar los futuros problemas legales que pueda tener la Juventus, los cuales se esperan que sean unos pocos.
Mientras, LaLiga ha reclamado que se apliquen sanciones deportivas de manera inmediata a la Juventus. Lo hace debido a la dimisión de su junta directiva en un movimiento que responde a la implicación del club piamontés en la ‘investigación Prisma’, la cual fue abierta por la Fiscalia de Turín por contabilidad falsa.
El pasado mes de abril, LaLiga ya presentó denuncias contra la Juventus, el Manchester City y el PSG por incumplir el fair-play financiero. “La sostenibilidad financiera es primordial para proteger el negocio del fútbol. Protejamos nuestro fútbol”, reza el comunicado realizado desde la patronal.
