Mundial Qatar 2022: Marruecos, único representante árabe en la copa, celebra su histórico triunfo contra España

DOHA (enviado especial).- Llantos contenidos, rezos y locura total. Hakimi la picó en el último disparo y eliminó a España del Mundial de Qatar. Más de 25 mil hinchas terminaron abrazados en las tribunas del Education City. Los jugadores corrieron desesperados hacia la cabecera donde se consumó el histórico triunfo por penales de la selección del norte de África. Batacazo futbolístico y una fiesta que no terminará hasta la madrugada aquí en Doha, y que ya se extiende por las principales ciudades marroquíes, árabes y en otros puntos del mundo como Barcelona y París.

Marruecos será el único representante del mundo árabe en la fase final de la primera Copa del Mundo celebrada en Medio Oriente. Y eso es una hazaña incomparable para una región que suele mirar por televisión los triunfos de las grandes potencias y se calza camisetas de millonarios equipos europeos.

Los bombos y el aliento marroquí no se detuvieron en todo el encuentro (KIRILL KUDRYAVTSEV/)

Qatar se despidió en el segundo partido, pero a nadie le importó. Los sauditas, que vivieron casi como una final del Mundial el triunfo contra la Argentina en el debut, fueron la hinchada más popular de esta copa, aunque también partieron en primera ronda.

Los ruidosos tunecinos, otros de los representantes del norte de África, guardarán entre sus mejores recuerdos el triunfo sobre Francia, último campeón mundial y uno de los grandes favoritos para esta competencia.

Irán se quedó en el amague frente a la selección estadounidense, en una previa más geopolítica que futbolística.

Los marroquíes celebran la victoria de Marruecos en Rabat (Anadolu Agency/)

El mundo árabe celebra hoy como propia la victoria de Marruecos. Desde la mañana, las inconfundibles camisetas rojas y verdes invadían toda la ciudad. Hijos de marroquíes que viven aquí, pero también en Arabia Saudita y Emiratos Árabes, viajaron para ver a su selección buscar el pase a cuartos de final. Otra parte llegó desde Casablanca, Fez y Marrakesh. Estaban confiados en su poderío.

Alargue, penales y triunfo

Noventa minutos para aguantar el asedio español. Un 0-0 que se prolongó en el alargue, y que terminó reflejando la impotencia de la selección europea y la sangre marroquí. Los penales fueron ejecutados contra la cabecera que tenía un grupo pequeño de españoles, que permaneció casi todo el partido en silencio. Los árabes sabían que esta podía ser su noche cuando el argentino Fernando Rapallini marcó la definición desde los doce pasos.

La hinchada de Marruecos explotó con el triunfo de su selección (KIRILL KUDRYAVTSEV/)

Los bombos no pararon de sonar en todo el encuentro. Primer penal convertido y explosión. Silbidos ensordecedores para el turno de España, palo y locura en las tribunas. El Education City se transformó en una caldera roja para la segunda tanda. Celebraron el penal que el arquero Yassine Bonou, “Bono”, le contuvo a Soler y se amargaron con el tiro que Unai Simón le atajó a Benoun.

Otra vez Bono se quedó la pelota que pateó el capitán Sergio Busquets y se empezaba a probar el traje de héroe nacional.

Hakimi la picó en el último penal y la locura fue total. Las dos cabeceras casi colmadas de hinchas marroquíes seguían completas, aún media hora después de finalizado el partido. Los alrededores del Education City se transformaron en una parte de Marruecos en Medio Oriente.

 

Generated by Feedzy