Leo Messi y Fabián Ruiz repararon al final una tarde de desgracias del Paris Saint-Germain, que salió victorioso de Montpellier después de dos goles anulados por el VAR y de perder antes de la media hora, por lesión, a Kylian Mbappé, que falló un penalti dos veces, y a Sergio Ramos.
Durante la primera mitad todo eran malas noticias para el conjunto de Christophe Galtier, que necesitaba un triunfo, un espaldarazo en la Ligue 1 después solo haber podido ganar uno de sus últimos cuatro partidos. El reencuentro con el triunfo acentúa su liderato. Amplía a cinco puntos su distancia respecto al Marsella, ahora segundo tras caer el Lens
No desatascó el encuentro el París Saint Germain hasta la segunda parte. En la primera todo le salió mal al campeón. Y especialmente a su líder, Mbappé, que falló dos veces un penalti. A los diez minutos, por un agarrón de Christopher Jullien a Sergio Ramos. Lanzó el astro galo y detuvo el guardameta Benjamin Lecomte. Pero se tuvo que repetir. Mbappé lo lanzó al otro lado y dio en el palo tras tocar nuevamente Lecomte. Tampoco aprovechó el rechace, que lo mandó a las nubes con todo a favor.
Poco después, en el 21’, tuvo que ser sustituido. Sufrió una dura entrada de Leo Leroy y salió dañado. Hugo Ekitike ocupó su sitio. Después le tocó a Sergio Ramos. El central español salió del campo a la media hora, mareado, tras un golpe con Boubakar Kouyaté.
Marcó por fin Leo Messi, en el 34’, pero el VAR invalidó el gol. Igual que en el minuto 52, cuando Achraf llevó la pelota a la portería. También de manera ilegal por fuera de juego de Fabián.
Cambió el asunto a partir del 55’, en una contra dirigida por Carlos Soler, que envió el balón a Achraf en profundidad. El lateral encaró al meta, que rechazó el balón. Cayó a Ekitike, que centró a un Fabián Ruiz que no falló. Llevó la tranquilidad el tanto del español, que asistió en el segundo, en el minuto 72, culminado a la perfección, con una finalización de lujo, por Leo Messi.
Aun así, le tocó sufrir de nuevo al PSG al final porque los locales acortaron distancias por medio de un centro de Stephy Mavididi que culminó Arnaud Nordin, que apenas alentó al equipo de Romain Pitau porque en el añadido, Warren Zaire-Emery volvió a ensanchar la renta para los parisinos.