Marc Márquez vivió en sus propias carnes una escena que puede extenderse en los próximos meses. La afición portuguesa pitaba al piloto español más laureado de la historia tras protagonizar una acción temeraria en la que tiró al ídolo local Miguel Oliveira y casi se lleva por delante a Jorge Martín. El piloto fue capaz de frenar a tiempo su Honda arruinando la carrera de sus rivales y la suya propia en el Gran Premio de Portugal.
No es el primer incidente de carrera que Marc Márquez protagoniza por ir pasado de vueltas. El año pasado, sin ir más lejos, destruyó parte de las opciones de campeonato mundial de Fabio Quartararo tras una colisión en el Gran Premio de Aragón. Márquez también tiró en esa carrera a Takaaki Nakagami siendo un auténtico desastre para Honda.
En 2021, Márquez también tuvo un incidente con Jorge Martín al que dejó sin ninguna opción en el Gran Premio de Gran Bretaña tras llevárselo puesto. Precisamente el piloto de Ducati fue el primero en poner el giro en el cielo contra el ilerdense por ir otra vez demasiado pasado de vueltas. “Estoy cansado ya de esto. Prefiero tener a Marc delante porque sé que si no, voy a recibir un golpe. Espero que no vuelva a destrozar la carrera de dos pilotos. Con pedir perdón ya no vale”, dijo duramente.
A las críticas de Martín se ha unido un Aleix Espargaró que no quiere que más gente se haga daño tras ver la terrible caída de su hermano Pol en Portimao. “El accidente de Marc me parece gravísimo. Le podía haber explotado la rodilla a Miguel Oliveira y que se quedara sin correr nunca más en toda su vida. Ha sido un impacto brutal”, aseveró.
“Nos encontramos en la clínica y me dijo que seguramente tuvo un problema con los frenos. No puedo decir nada más, le tengo respeto. Acepto sus disculpas. Al mismo tiempo, cuando tienes un problema con estas motos intentas frenar un poco antes”, añadió un Miguel Oliveira que vio cómo fastidió sus opciones y la de un equipo KTM más que mejorado gracias a la ayuda de la escudería Red Bull de Fórmula 1.
Los fantasmas de Rossi
Márquez ya no tiene ni defensores en España tras estas declaraciones que dejan a las claras que muchos en MotoGP no se fían ni están tranquilos con el de Honda cerca. Por si fuese poco, otro de los perjudicados por piques en la pista con Marc no ha olvidado lo que vivieron. Valentino Rossi atacó con bala al catalán en un podcast en Italia curiosamente justo antes del inicio de la temporada de su resurgir.
“En Malasia 2015, Márquez me molestó toda la carrera, intentó derribarme y después le apreté y nos tocamos. Dice que le di una patada, pero no se la di. De todas formas, se cayó y después de la carrera fui a ver a los comisarios y pensé que le harían salir último, pero en lugar de eso me retrasaron a mí al último puesto y le regaló el título a Lorenzo, que ni siquiera era su compañero”, dijo.
Rossi admitió que ni olvida ni perdona “aquella herida” dejando entrever que sus herederos van a intentar poner las cosas complicadas a Márquez para que ni mucho menos iguale sus nueve títulos Mundiales. El vigente campeón Pecco Bagnaia es el alumno más aventajado de ‘El Doctor’ y tiene claro que debe impedir que Marc pueda volver a ganar tras cosechar su último Mundial en 2019.
Junto al piloto de Ducati, formado en el rancho de Rossi, se encuentran Luca Marini y Marco Bezzecchi. Ambos corren para el equipo de Valentino en MotoGP y tienen claras instrucciones para cuando se encuentren con Marc en pista: jugar lo más duro posible con el piloto que más arriesga. Esperemos que MotoGP no se descontrole con el caso Márquez, pero es un hecho que cada día tiene más enemigos que amigos en pista.