Los ministros de Kenia han aceptado entregar su salario de un mes como “contribución individual y colectiva” a la respuesta de las autoridades a la grave sequía que afecta al país africano, según ha anunciado la Presidencia keniana.
“En solidaridad con todos los kenianos afectados por la sequía, se ha acordado que todos los miembros (del Consejo de Ministros) entreguen el salario de un mes como contribución individual y colectiva a las intervenciones estatales que apoyan a los kenianos afectados por la sequía”, ha dicho.
Así, ha afirmado en un comunicado publicado a través de su cuenta oficial en la red social Twitter que “como parte de las medidas a largo plazo para abordar las sequías cíclicas y el coste de la vida, el Gobierno ha sopesado la situación del suministro de alimentos en el país” y ha reconocido que el coste de algunos productos básicos es “inaceptablemente alto”.
“El Gobierno ha señalado que la cosecha de maíz está en marcha en el país, con un cálculo anual estimado de 30 millones de bolsas de maíz. Para honrar el deber sagrado de la nación con los agricultores, el Gabinete ha decidido que la producción tendrá acceso prioritario en el mercado”, ha desvelado.
El Gobierno keniano ha reconocido que el consumo anual es superior a esta cifra, por lo que el déficit “será cerrado con la importación de diez millones de bolsas de maíz”, antes de recalcar un subsidio a los fertilizantes para impulsar la producción de los agricultores kenianos.
En este sentido, ha defendido que esta medida “incrementará la producción de alimentos y ayudará a reducir los costes generales de la producción y, con ello, el del creciente coste de la vida”.
Naciones Unidas y sus socios humanitarios en Kenia reclamaron la semana pasada 472,6 millones de dólares (cerca de 457 millones de euros) para entregar ayuda en 2023 a 4,3 millones de personas afectadas por la sequía en el país y alertaron de que la crisis podría empeorar durante los próximos meses.