Los hijos de españoles tienen un 36 % más de posibilidades que los de los inmigrantes de ser elegidos para superar el proceso de selección en las ofertas laborales, según un estudio del Ministerio de Inclusión, que cifra en casi un 12 % la discriminación en el acceso de los hijos de inmigrantes al mercado de trabajo.
La investigación, elaborada por el Instituto de Investigación Ortega y Gasset y promovida por el Observatorio Español del Racismo y la Xenofobia (Oberaxe), dependiente del Ministerio de Inclusión, se ha realizado a partir del envío de dobles candidaturas (currículo de un hijo de españoles y otro de inmigrantes de nacionalidad china, peruana, marroquí y dominicana) a 1.002 ofertas de trabajo.
Con motivo del Día Internacional de la Eliminación de la Discriminación Racial, que se conmemora este 21 de marzo, EFE ha conversado con Rosa Aparicio, una de las autoras de “Aproximación empírica a la discriminación de los hijos de inmigrantes en el mercado laboral”.
Según ha explicado la socióloga, el experimento constata que el sesgo discriminatorio hacia los perfiles de los hijos de inmigrantes es uno de los factores que influyen en el proceso de aceptar o rechazar una candidatura, lo que incrementa la “importante” desigualdad en el acceso al mercado laboral de estos jóvenes.
En concreto, los resultados cifran esa discriminación en casi un 12 % en conjunto, sin diferencias significativas entre los hijos de peruanos, marroquíes y dominicanos, pero sí entre los descendientes de chinos (8,8 %).
Pero también se observa una “discriminación inversa o positiva” en nichos específicos del mercado laboral con perfiles concretos. Ocurre con un 4,6 % de hijos de inmigrantes chinos en relación con empleos cualificados y técnicos o con otro 4,8 % de los hombres marroquíes en el ámbito del tercer sector.
Para la investigadora es claro que existen prejuicios sobre los distintos orígenes de los hijos de inmigrantes y que unos son más negativos que otros, pero también existen indicios de que en momentos determinados y para algunas ocupaciones el capital étnico puede ser un factor positivo a la hora de ser seleccionado para un empleo”, advierte Aparicio.
“Ser hijo de españoles es la variable que otorga más posibilidades de ser aceptado en un proceso de selección, y en sentido contrario, la que otorga menos posibilidades de ser explícitamente rechazado”, asevera la socióloga al indicar que los descendientes de autóctonos tienen un 36 % más de posibilidades que los de los inmigrantes.
La investigación evidencia también que existen diferencias en el nivel de discriminación de los distintos colectivos de origen inmigrante: los hijos de marroquíes tienen un 50 % más de probabilidades de ser rechazados frente al 30 % de las de los peruanos y un 31,7 % de las de los hijos de chinos.
Ser hombre o mujer también influye a la hora de sufrir más o menos discriminación según el colectivo de ascendencia inmigrante. Las mayores diferencias se dan entre los hombres y las mujeres de origen dominicano y marroquí.
En el caso de los hijos de dominicanos son los hombres los que se ven más afectados respecto de las mujeres (16,3 % frente a 5,1 %), mientras que en el de los de origen marroquí son ellas las más discriminadas (14,7 % frente al 9,6 %).
La autora subraya que el sesgo hacia los perfiles de hijos de inmigrantes es uno de los factores que influyen en el proceso de decisión de aceptar o rechazar una candidatura para un puesto de trabajo, pero que entran en juego una multiplicidad de factores difíciles de delimitar.
La situación específica del mercado laboral en cada momento, el tipo y las características concretas del empleo para el que se hace la oferta, el grado de transversalidad de la profesión de que se trate, el nivel de cualificación requerido, así como el nivel general de demanda en un contexto concreto son algunos de esos factores.