Otra vez la barrera de los octavos de final. La selección española se despidió del Mundial de Qatar 2022 tras caer ante Marruecos en la tanda de penaltis, después de que el marcador del Education City Stadium no se moviese en los 120 minutos que duró el encuentro. Algo que ya sucedió en la Copa del Mundo de Rusia 2018. La historia se repite.
España dominó la eliminatoria ante el combinado africano, pero el balón decidió no entrar. Tampoco se intentó en exceso, dado que la ‘Roja’ no encontró la tecla para perforar el muro marroquí que construyó Walid Regragui alrededor de su portería. Prórroga incluida, la posesión de los de Luis Enrique rozó el 80%, pero tan solo completaron dos disparos a puerta de un total de seis.
Cuatro años atrás, la muralla rusa también funcionó para destronar a una España tocada de muerte, tras la destitución de Lopetegui un día antes de que arrancase la cita mundialista -su negociación contractual con el Real Madrid a espaldas de la Federación tuvo la razón-. Fernando Hierro asumió las riendas de la selección de forma interina con un resultado que muchos ya anticipaban. Menudo terremoto. Los octavos también supusieron el adiós para la ‘Roja’.
Nuevamente, la tanda de penaltis se le atragantó a España. En 2018, tras empatar 1-1 con el gol en propia de Sergey Ignashevich y el de Dzyuba antes del descanso, el desenlace tuvo lugar desde los once metros. En aquella ocasión, la selección sí convirtió algún lanzamiento. Concretamente, tres: el de Iniesta, Piqué y Ramos. Los errores de Koke y Iago Aspas, combinados con el pleno al cuatro de los rusos hizo que la ‘Roja’ hiciese las maletas antes de lo que le hubiese gustado.
Ayer, el porcentaje de acierto español en la tanda de penaltis fue nulo. Ni Pablo Sarabia, Carlos Soler ni Sergio Busquets convirtieron sus lanzamientos. El objetivo de la selección era el de disputar siete partidos en la Copa del Mundo, pero tuvo que conformarse con cuatro. Otra vez.
2010, un espejismo en décadas
España tocó el cielo de Sudáfrica en 2010 alzando la Copa del Mundo por primera y única vez en su historia. Algo inaudito para una selección con resultados tirando a pobres en las citas mundialistas. De hecho, salvando la edición en la que bordaron la estrella en el pecho de la ‘Roja’, no ha logrado pasar de octavos de final en ninguna de las últimas cinco ediciones.
Este año, al igual que el anterior, los octavos de final han dictado sentencia, como también sucedió en el Mundial de Alemania 2006. En Brasil 2014, la selección española no pasó ni de la fase de grupos, como tampoco lo hizo en Francia 1998. Sí llegó más lejos en la Copa del Mundo de Corea-Japón 2002, cayendo en cuartos frente a una de las anfitrionas -precisamente en la tanda de penaltis- con uno de los mayores escándalos arbitrales que se recuerdan.
