Invicta Electric se ha propuesto convertirse en el principal referente de la movilidad eléctrica de corte urbano. Y tiene todos los argumentos para conseguirlo. La electricidad ya está marcando la actualidad de la movilidad. Una situación que a inicios del próximo año se reforzará con la entrada de las zonas de bajas emisiones en todas las ciudades de más de 50.000 habitantes.
Este grupo español con sede en Burgos acaba de presentar los pilares sobre los que va a desarrollar una ambiciosa estrategia basada en crear la más completa oferta de soluciones de transporte eléctricos de corte urbano.
Un completo catálogo de medios de «micro movilidad» compuesto por hasta 49 referencias entre las que se incluyen patinetes, vehículos comerciales ligeros, pasando por las e-bikes, scooters de dos y tres ruedas – tanto con el permiso AM como con el carné A1 o el B-, cuadriciclos y micro coches.
Toda una oferta de modelos pertenecientes a firmas de origen europeo (Alemania, Italia, Suiza y España), asiático (Japón y China) e incluso de Estados Unidos, siempre bajo elevados estándares de calidad en lo que refiere tanto a la elección de componentes como en sus procesos de producción, y con todas las homologaciones necesarias.
Prueba de ello es una exigente política de servicio post venta que se asienta en detalles como el hecho de ofrecer una garantía en todos sus productos de 3 años ampliables a 5, y hasta a 7 años en el caso de los microcar y city car.
El principal objetivo de Invicta Electric es el de convertirse en el «market place» de referencia del mercado de la movilidad eléctrica. Para ello cuenta con un escaparate de productos en continua evolución que no para de crecer, y al que se acaban de incorporar importantes novedades en todas sus líneas de producto.
En este sentido, su oferta se ha reforzado recientemente con modelos como el Invicta Electric D2S L7 Junior, un vehículo que se puede conducir a partir de los 16 años que monta un motor de 12 kW (16,3 CV), alcanza una velocidad máxima de 85 km/h y cuenta con una autonomía de 120 kilómetros.
Este vehículo es el complemento perfecto para el D2S, el modelo estrella de su gama, disponible en versiones de 17 kW o 27 kW, con hasta 250 kilómetros con una sola carga y un maletero de 380 litros de capacidad.
Otro de los más destacados es el Estrima Biró, un microcar urbano de sólo 1,8 metros de largo y dos tipos de batería (50 o 100 km) con el que desenvolverse como la ciudad con la practicidad de un scooter.
En lo que respecta a los vehículos comerciales destaca el Logistar LS200, en sus diferentes configuraciones de caja alta, pick-up o furgón con hasta 6,9 metros cúbicos de capacidad. Puede llegar a ofrecer 310 km de autonomía y todas las comodidades de confort, se presenta como la alternativa ideal para el reparto y distribución de última milla.
También llama la atención el EVUM aCar, un vehículo comercial de fabricación alemana, de diseño robusto y tracción 4 x 4 único en el mercado de los eléctricos. Entre otras características, el EVUM aCar equipa dos motores, uno por eje, con 10 Kw (13,6 CV) de potencia cada uno, alcanza una velocidad de 70 km/h, tiene 150 km de autonomía y su capacidad de carga es de una tonelada.
Ya en terreno de las motos, Invicta Electric dispone de novedades como la Quazzar e-divine plus batería extraíble (90 km) y de estilo retro, o las WOW 775 y Electric OX One (esta última de fabricación española), ambas con 100 km de autonomía.
Para cubrir el segmento de los ciclomotores Invicta se refuerza con modelos como los Utrera City, Cobreces o Wellta Taiga, entre otros.
Las novedades en la gama de dos ruedas se completan con las bicicletas eléctricas con las Rayvolt como protagonistas. Una oferta que se conforma en sus variantes Cruzer, Clubman y Ringo, carcaterizadas por un atractivo diseño a medio camino entre una moto retro y una café-racer.
