Apenas dos meses y medio ha durado la etapa de Jonathan Risueño en el Olot. El técnico llegó como salvavidas tras el mal inicio de curso con Manix Mandiola, pero la realidad es que se va de La Garrotxa sin ningún triunfo en su haber tras ocho jornadas de liga. Íñigo Arriola, hasta ahora su segundo, será el encargado de liderar ahora el proyecto con la clara misión de salir de las posiciones de descenso.
Son ya tres entrenadores para un Olot que no da con la tecla esta temporada. Los cinco puntos de 24 posibles con Risueño no han mejorado las prestaciones con Mandiola, también condenado por los malos resultados. Sin embargo, el valenciano se va con la consciencia tranquila.
“Me voy bien, hemos intentado darle la vuelta al equipo y creo que uno tiene que estar satisfecho cuando lo ha dado todo. Esto es fútbol, va de ganar y no lo hemos conseguido. A ver si el tercer entrenador consigue gestionarlo de otra manera. Creo que el equipo estaba muy cerca de ganar y estaba compitiendo muy bien”, aseguró Risueño en su despedida en ‘Ràdio Olot’, donde aseguró que ya se olía la destitución. “Siete días antes a mi gente de confianza ya les dije que si no ganábamos al Espanyol B ya notaba que no continuaríamos”.
Consumada su despedida, el Olot no tardó en confirmar a su relevo: Íñigo Arriola. El técnico, mano derecha de Mandiola durante muchos años y que se quedó como compañero de viaje de Risueño, vivirá su primera experiencia en un banquillo como primer espada.
“Agradecer la confianza depositada en mí, pero he de decir que no me gusta estar aquí por las circunstancias en las que se ha dado. Soy uno de los máximos responsables de esto, la trayectoria no ha sido buena y si fuera mejor yo no sería protagonista. Me siento responsable de los resultados hasta ahora. No esperaba estar aquí”, aseguró en su presentación, donde asimismo aseguró que “me veo fuerte y estoy rodeado de un buen equipo, creo que podemos dar una segunda vuelta bastante mejor”.
Blázquez, de ayudante
La plantilla ya conoce así a su nuevo entrenador y también al que ejercerá de ayudante. Albert Blàzquez, hasta ahora inédito por lesión, da el paso a los banquillos y ejercerá de enlace con el vestuario además de aportar “un punto de vista táctico y técnico”, explicó el presidente Joan Agustí, presente en el acto. “Creemos que ésta es la mejor decisión, necesitamos resultados inmediatos y pensamos que desde el punto de vista anímico el mejor líder que tenemos es Íñigo Arriola”, aseveró.