A Carlo Ancelotti, entrenador del Real Madrid, le preocupa más que su equipo no se desenganche del buen juego que ha aparecido en los últimos tres partidos que el calendario, aunque le moleste tener que jugar cuatro partidos de Liga en 10 días y en los seis siguientes, la final de la Copa y la ida de la Champions contra el Manchester City.
El italiano sabe que si tiene al equipo enchufado todo será más fácil, pero eso le obliga a rotar y que los secundarios asuman rol de titulares como hicieron en Cádiz, donde jugaron uno de los mejores partidos de temporada. El Celta marcará esa tendencia, un equipo que ha crecido de la mano de Carvalhal para acercarse a la permanencia, aunque llega con varias bajas importantes.
BANCO DE PRUEBAS
Ancelotti tampoco piensa demasiado en la Liga. Mucho se tendría que equivocar el Barça para dejarse cazar, mientras que por el retrovisor ve al Atlético cada vez más cerca (dos puntos). La Liga sirve de banco de pruebas para llegar fino a esos tres partidos, Osasuna y City, dos títulos que salvarán la temporada.
El Celta ha dado un salto hacia adelante desde que Carlos Carvalhal reemplazó a Eduardo Coudet. La irrupción de Gabri Veiga como el mejor socio de Iago Aspas han refrescado el ataque celeste, que como equipo se ha reorganizado bajo las órdenes del portugués. El hándicap para visitar el Bernabéu son las cinco importantes bajas que tiene, sobre todo en defensa, ante un rival tan poderoso en ataque que, además, ha cerrado filas en defensa en su tres últimos partidos en los que no ha recibido ningún gol.
Mingueza, Machesín, Aidoo y Carlos Pérez, lesionados, y Hugo Mallo, sancionado, son bajas celestes; mientras que Mendy y Alaba, en el equipo blanco.
ROTACIONES
Ancelotti hará rotaciones para “dar descansos y tener bien físicamente a todos”. Se espera que Carvajal, Camavinga, Kroos, Modric y Rodrygo o Vinicius se queden en el banquillo. Y que Lucas Vázquez, Nacho, Rudiger, Tchouameni, Ceballos y Asensio repitan titularidad tras jugar en Cádiz y ser suplentes ante el Chelsea. Courtois, Militao, Valverde y Benzema, con Vinicius o Rodrygo, se mantienen en el once. Un equipo reconocible para seguir enganchados al buen momento de juego en el que están, y que el Celta pretende anular para llevarse algo del Bernabéu.
