Nuestros días suelen ser ajetreados y, cuando cargamos la lavadora, basta una sola prenda del color equivocado para que se estropee. Entre los remedios más populares está la lejía, pero sabemos que este producto no sólo es muy contaminante, sino que también podría ser perjudicial.
Si queremos poner remedio a nuestros errores, lo primero es actuar con prontitud. Después, debes saber que, si quieres, puedes manchar tu ropa de forma natural. Si quieres descubrir cómo, sólo tienes que seguir leyendo.
Todos tenemos vinagre en casa. El vinagre blanco, que utilizamos en la cocina para aliñar ensaladas y otros platos sabrosos, es un buen remedio para quitar el rosa de las prendas blancas. Para que este método funcione, las prendas deben estar todavía húmedas. Mientras no estén completamente secas, el color rosa no se pegará permanentemente a las prendas.
Lo único que tienes que hacer es sumergir tu ropa teñida de rosa en un barreño con agua fría a la que añadirás 2 tazas de vinagre. Deja actuar esta solución durante toda la noche, lava de nuevo la ropa en la lavadora y verás cómo queda como antes.
El limón y el agua oxigenada son 2 productos que casi no faltan en nuestros hogares. En caso de emergencia, puedes combinar estos 2 ingredientes para eliminar las manchas rosas de tu ropa blanca.
Cómo hacerlo es realmente muy sencillo. Añade 2 cucharadas de agua oxigenada y el zumo de un limón a la lavadora. El limón tiene propiedades blanqueadoras, mientras que el peróxido de hidrógeno libera oxígeno, permitiendo que tu ropa vuelva a ser blanca. Sin embargo, para que esto ocurra, el lavado debe realizarse a 40 grados como mínimo, ya que de lo contrario no se activará esta reacción.
Si aún no lo sabes, el percarbonato sódico es la alternativa ecológica a la lejía. Este producto, que puedes encontrar en la sección de limpieza de Mercadona, blanquea, destiñe e higieniza la ropa incluso cuando se lava en agua fría. Si te encuentras con ropa blanca que se ha vuelto rosa en la lavadora como consecuencia de un lavado incorrecto, que no cunda el pánico.
Pon la ropa manchada en la lavadora y añade un cacito de percarbonato sódico en el cajón del detergente o directamente en el tambor. Si es posible, haz un lavado a alta temperatura y así verás cómo tu ropa vuelve a brillar de blanco. Pero ten cuidado, ya que este remedio no es apto para todo tipo de tejidos. Evita utilizarlo con prendas de lana o seda.
