El Ministerio de Educación y Formación Profesional abrirá el próximo 27 de marzo, y hasta el 17 de mayo, el plazo para solicitar las becas correspondientes al curso 2023/2024, que se realizará a través de su web.
Se estima que la cuantía media de estas ayudas será de 1.730 euros para estudiantes no universitarios y 3.130 para universitarios. La principal novedad de esta convocatoria es el incremento de 1.600 a 2.500 euros en las becas de residencia para estudios postobligatorios, que beneficiará a unos 125.000 alumnos y alumnas.
Esta medida tendrá especial incidencia en familias de entornos rurales cuyos hijos deben desplazarse a otras localidades para poder estudiar.
Así lo ha avanzado la titular del ministerio de Educación, Pilar Alegría en Navalmoral de la Mata, donde asiste a la inauguración del I Congreso Nacional de Escuela Rural, y donde ha detallado que en las “próximas semanas” también se abrirá el plazo para la solicitud de las becas complementarias de 400 euros para alumnos con necesidades educativas especiales, que llegarán a unos 240.000 alumnos.
Estas becas van destinadas a estudiantes con una discapacidad reconocida de al menos el 33 por ciento, aquellos con trastornos graves de la conducta o el habla, así como aquellos con trastorno del espectro autista o con altas capacidades.
La ministra ha remarcado el esfuerzo realizado por el Gobierno en este ámbito, en el que se ha alcanzado la cifra récord de 2.520 millones de euros que llegarán a más de un millón de estudiantes. Asimismo, sobre la apertura del plazo de solicitud, ha señalado que es una “buena noticia” que se vayan “ganando estos tiempos”, de forma que cuando los alumnos comiencen el curso en septiembre ya sepan si van a contar con una beca y su cuantía.
Escuela rural
Con respecto al I Congreso de Escuela Rural, ha comentado su “aprecio” por este formato, en tanto que procede de un municipio de 400 habitantes, y que con el paso del tiempo ha ido “ganado más adeptos” e incluso se ha visto reflejado en las nuevas normas educativos, como es el caso de la propia LOMLOE, que hace referencia a la “importancia” que tiene la escuela rural en su artículo 82.
Una escuela rural que, según ha remarcado, ofrece una educación “de calidad e innovadora”, así como es la que “más garantía da a la educación personalizada” que “tanto” desean, ha dicho, los padres y madres de los alumnos.
En cualquier caso, ha subrayado que “hay que seguir apoyando a la escuela rural”, también porque “todo el mundo entiende” la “importancia” que tienen en los municipios en los que se asientan. Según, ha señalado, en España el 15,9% de los centros educativos están ubicados en poblaciones de menos de 2.000 habitantes –cifra que se eleva al 44% en el caso de Extremadura–. Entre ellos, hay 714 centros rurales agrupados en los que estudian alrededor de 73.000 niños y niñas.
Asimismo, se ha referido a la apuesta de las administraciones autonómicas, con la apertura de este tipo de centros a partir de cuatro alumnos. En el caso del ministerio, ha señalado el aumento de los recursos a través de todos los planes en colaboración con las comunidades autónomas, entre los que ha citado el PROA + y otros que “siempre tienen en cuenta la dispersión geográfica y la importancia de la escuela rural”.
Atractiva para los docentes
A su vez, la consejera de Educación y Empleo, Esther Gutiérrez, ha felicitado a la Asociación Morula por la organización de este congreso que versa sobre uno de los “ejes vertebrales” de la política educativa de la Junta de Extremadura, como es la Escuela Rural, tal y como viene reflejado en la ley educativa extremeña.
Gutiérrez ha señalado que las administraciones la están contemplando “no solo como necesidad, sino como oportunidad”, por lo que es “bueno que a este tipo de lucha” lleguen aportaciones de una asociación particular, como el caso de la organizadora del congreso, que servirá para seguir avanzando en los retos de la escuela rural.
En este sentido, ha señalado que el principal es hacer la escuela rural “atractiva para los docentes”, teniendo en cuenta que se trata de un “espacio de oportunidades”, pues ofrece una “forma diferente” de formar, con una “pedagogía adaptada al contexto, una oportunidad para innovar, atender de forma individualizada y personalizada” a los alumnos.
Por su parte, la alcaldesa de Navalmoral de la Mata, Raquel Medina, ha remarcado que esta escuela representa “mucho” para las poblaciones que dependen de los pueblos más pequeños, así como ha añadido que no solo constata una formación educativa, sino también “una forma de vida”.
Una escuela que transmite unos “conceptos vitales” que “perduran en tiempo”, y que tienen que ver con el “arraigo” de los alumnos y con un “compromiso con su tierra” que en el caso de Extremadura es “muy importante”.
Singularidad propia
Este congreso está organizado por la asociación educativa Mórula y el ministerio, y que cuenta con la colaboración y el patrocinio de la Consejería de Educación y Empleo de la Junta de Extremadura, el Ayuntamiento de Navalmoral de la Mata y la Fundación Princesa de Girona.
Bajo el lema ‘Una escuela con singularidad propia’, se ha organizado como punto de encuentro para quienes conforman la comunidad educativa rural y está dirigido, principalmente, al profesorado de toda España, agentes de las administraciones educativas y expertos en el ámbito de la escuela rural.
En él se han dado cita docentes, la mayor parte de ellos de centros educativos de pequeñas poblaciones, pero también universitarios, profesores en prácticas, directivos de centro… Alrededor de 250 han acudido a la Casa de la Cultura de esta localidad extremeña para compartir y visibilizar buenas prácticas y proyectos educativos desplegados en las escuelas rurales.
Tras el acto inaugural al que ha asistido la ministra, han comenzado las diferentes sesiones que incluyen conferencias, paneles, exposición de proyectos educativos y la difusión de buenas prácticas. La jornada se completa con música, teatro humorístico y la emisión de un programa de radio en directo.
La variedad geográfica y demográfica de España reserva “un papel fundamental a la escuela rural dentro del tejido educativo”, señalan los organizadores. Estas escuelas constituyen “uno de los ejes vertebradores de la sociedad rural”, pues contribuyen a su cohesión y son una puerta para mostrar al mundo su “realidad social y educativa”.
