Mantener las plantas frescas y cuidadas no es una tarea sencilla. Más a menudo de lo que nos gustaría vemos como las plantas que decoran nuestra casa se van secando o perdiendo hojas. Exceso o falta de agua, bichos, falta de luz, quemaduras por el sol…son muchas las razones que pueden estar provocando que nuestras flores terminen muriendo.
Hay ciertos trucos que te pueden ayudar a mantenerlas con vida durante más tiempo. Uno en concreto te servirá para protegerlas de los insectos sin necesidad de recurrir a pesticidas que pueden terminar de estropearlas. La clave está en la sol gorda.
Poniendo sal gorda alrededor de la planta evitarás que las hormigas, babosas o caracoles ataquen tus plantas. Además de la pimienta, el ajo en polvo o la canela, la sal también es muy eficaz para alejar estos insectos de forma natural.
No debes echarla en la tierra. Lo que tendrás que hacer es echar un puñado de sal alrededor de la planta para conseguir mantener alejado a cualquier bicho que pueda acercarse.