El Bayer Leverkusen de Xabi Alonso se impuso este domingo por 2-1 ante el Bayern Múnich, lo que deja al Borussia Dortmund como líder con un punto de ventaja sobre el club bávaro.
Pese a que la victoria del equipo de las aspirinas llegó gracias a dos penaltis sancionados por el VAR y convertidos por Exequiel Palacios, no se puede decir que haya sido una victoria afortunada.
El Leverkusen fue el mejor equipo durante la mayor parte de los noventa minutos. Ya su comienzo fue muy activo, tuvo ventajas en posesión de pelota y en llegadas al área en los primeros minutos frente a un Bayern que se mostraba prudente y jugaba algo más replegado que de costumbre.
El entrenador del Bayern, Julian Nagelsmann, había apostado por una defensa de tres centrales con Joao Cancelo y Alphonso Davies jugando como carrileros adelantados. Sin embargo, en los primeros minutos Cancelo y Davies fueron más laterales en una defensa de cinco que carrileros ofensivos.
Davies tenía mucho trabajo por su banda con Frimpong, que era una de las principales bazas ofensivas del Leverkusen, mientras que Cancelo al comienzo no pareció atreverse a adelantar su posición.
Mucho hablaba a favor del Leverkusen. En el 15 hubo una buena aproximación por la izquierda que terminó en un centro de Adli que Davies alcanzó a cortar para impedir el remate de Frimpong. Luego, en el 16 el propio Frimpong tuvo una buena ocasión a pase al llegar al área tras recibir un pase entre líneas del argentino Exequiel Palacios. Sin embargo su remate, tras regatear a Davies, fue desviado a saque de esquina por el meta Yann Sommer.
No obstante, al Bayern le bastó llegar una sola vez para irse en ventaja en el minuto 22. La jugada la inició Leroy Sané que abrió juego para Cancelo a la derecha del área. Cancelo lanzo un centro que recibió que Leon Goretzka y éste la tocó atrás para que Joshua Kimmich definiera con un remate de pierna derecha. Después el Bayern empezó a defender un poco más alto y empezó a tener fases más largas de posesión.
Sin embargo, cuando los equipos se fueron al descanso había mucho en la hoja de estadísticas que seguía hablando a favor del Leverkusen. La ventaja en cuanto a posesión de balón era mínima, 51 a 49 por ciento, pero el Leverkusen registraba 5 saques de esquina a favor frente ninguno y contra y 6 disparos con dirección a puerta contra uno del Bayern que, sin embargo, había terminado en el fondo de la red.
El Leverkusen siguió insistiendo en la segunda parte y logró el empate en el 55 con penalti convertido por Palacios y que se había producido por una falta de Pavard sobre Adli que el árbitro Tobias Stieler sancionó tras ser alertado por el VAR.
El partido en la segunda parte fue algo más equilibrado que en la primera, el Bayern tuvo sus llegadas, como en el 68 una excelente ocasión en los pies de Jamal Musiala cuyo disparo se marchó desviado cerca del segundo poste.
El segundo gol del Leverkusen llegó en el 71. Otra vez una falta contra Adli, esta vez de Dayot Upamecano. Otra vez Stieler que no considera que haya falta y amonesta a Adli por simularla pero luego, tras ser alertado por el VAR, corrige y sanciona la pena máxima que Palacios convierte.
En la fase final el Leverkusen tuvo que enfrentar una arremetida ofensiva del Bayern que superó con éxito. El meta Lukasz Hradecky tuvo dos buenas paradas ante remates de Leroy Sané y Alphonso Davies.
Al final al Bayern no le alcanzó ni siquiera para el empate y vio como se le iba el liderado que puede recuperar en la próxima jornada cuando se enfrentará al Borussia Dortmund.
Una paradoja fue que en la tribuna los seguidores del Leverkusen tenían una pancarta en la que pedían eliminar el VAR.