Calma tras la tormenta. El Barça regresó al Johan Cruyff para lamerse las heridas tras su primera derrota europea de la temporada, y terminó reencontrándose con su mejor versión. El Alhama pagó los platos rotos, y solamente la falta de acierto en acciones puntuales y la magnífica actuación de Laura Martínez bajo palos pudo evitar que el 4-0 final fuese aún más amplio.
Ya sea por sed de venganza o por las ganas de reivindicarse de las menos habituales, las azulgranas no se guardaron nada en los prolegómenos del encuentro. Aprendieron del error cometido en tierras germanas, donde recibieron dos goles en apenas 10 minutos, y no tardaron en dar el primer golpe. Este llevó la firma de Claudia Pina que, aprovechando un gran envío de Bronze desde el flanco derecho, conectó un latigazo cruzado inalcanzable para la guardameta.
Lejos de dejar de pisar el acelerador, las de Jonatan Giráldez se lanzaron a por el segundo. Oshoala, con un par de situaciones de mano a mano, y Mariona pudieron ampliar ventajas, pero Laura Martínez se agigantó para contener sus acometidas.
El partido parecía encontrarse en punto muerto, y Marina Martí llegó a disponer de una ocasión para igualarlo. Viendo la falta de éxito del Barça en la zona de finalización, Salma optó por la solución más pragmática para poner tierra de por medio. La ex del Villarreal aprovechó un lanzamiento de falta para perforar la portería contraria.
Tras el paso por el túnel de vestuarios, el Alhama presentó un amago de rebelión mediante una presión asfixiante, pero este fue sofocado rápidamente por Bruna Vilamala. La ‘joya’ azulgrana avisó primero con una volea que se perdió por encima del travesaño y, posteriormente, comenzó a sortear obstáculos hasta internarse en área contraria, donde superó a la guardameta con un disparo por el palo corto. Minutos después, recibió una sonora ovación al ser sustituida.
El tercer gol terminó con las esperanzas del cuadro murciano, que terminó bajando los brazos tras la expulsión de Zaira. La superioridad numérica acentuó aún más el dominio azulgrana, que terminó firmando el cuarto y definitivo por mediación de Oshoala. La nigeriana pudo sacarse la espinita del gol con un zapatazo cruzado.