Dos palestinos murieron el lunes a manos del ejército israelí en Cisjordania durante una operación para destruir las casas de dos palestinos implicados en un ataque contra un comandante israelí, informaron autoridades locales.
Los palestinos Mohamed Samer Hoshieh, de 22 años, y Fuad Mohamed Abed, de 25 años, murieron por heridas de bala en una redada del ejército israelí en una zona de Yenín, foco de tensión en los últimos meses en Cisjordania ocupada, anunció el Ministerio palestino de Salud en un comunicado.
Por su parte, el ejército israelí indicó en un breve mensaje a la prensa que llevó a cabo una operación en la localidad de Kafr Dan, en Yenín, “para demoler las casas de los atacantes involucrados en el tiroteo junto al paso de Jalameh”, también conocido como Gilboa, donde murió el comandante israelí Bar Falah.
El ejército no ha realizado ningún comentario sobre las muertes mencionadas por el ministerio palestino.
La agencia de prensa palestina Wafa informó que 18 personas fueron arrestadas por el ejército en operaciones nocturnas en varios puntos de Cisjordania.
Un grupo de palestinos armados dispararon contra soldados israelíes el pasado 14 de septiembre en el paso de Jalameh, que comunica Yenín con Israel, provocando la muerte del comandante Bar Falah.
Las Brigadas de los Mártires de Al Aqsa, el brazo armado del movimiento Fatah del presidente de la Autoridad Palestina Mahmud Abas, reivindicaron este ataque. Entonces, dos palestinos de la aldea de Kfar Dan, sospechosos según el ejército israelí de estar implicados en el ataque fueron abatidos ese mismo día en enfrentamientos en Jalameh.
El ejército israelí destruye habitualmente las residencias de palestinos que considera responsables de ataques contra israelíes afirmando que tiene el objetivo de desincentivar estos actos.
gb/jjm/dhc/mas/zm/an/mis