El técnico del Espanyol, Diego Martínez, hizo autocrítica tras la derrota de este viernes en el campo del Almería (3-1) y no dudó en calificado su actuación como “el peor partido” de la temporada. “Creo que ha sido nuestro peor partido. Estuvimos mal, desajustados, imprecisos, incómodos”, afirmó.
Al ser preguntado por los motivos de esta mala imagen, el preparador gallego evitó las respuestas simples: “No hay solo una causa, deben darse muchas cosas. No hemos estado ni a nuestro nivel individual ni colectivo, yo el primero”. “Y en esos momentos en los que puede variar la dinámica, como el tiro de Edu Expósito o la acción que se revisa, no nos mete en el partido. Pero eso no quita que estuvimos mal y que hay que levantarse”, lamentó.
Sobre el estado de Joselu, que acabó el partido cojeando, y las sanciones a Óscar Gil y Vini Souza, Martínez aseguró: “Hasta para eso ha sido negativo. Jugadores que tienen cuatro tarjetas ven la quinta, con Joselu veremos las próximas horas cómo evoluciona la lesión”. “Pero hay que levantarse. Hemos finalizado la primera vuelta con 20 puntos y debemos ser estables. Ni en lo bueno sacamos los pies del tiesto ni en lo malo sale todo mal”, afirmó.
Preguntado por la necesidad de refuerzos, el técnico perico no se mordió la lengua: “He dicho ya muchas veces que todos somos conscientes de las necesidades que tenemos. Quedan 19 partidos y esto es muy complejo. Tengo plena confianza de que se pueda dar. Está claro que lo necesitamos y veremos cómo surgen las últimas horas de mercado”.