El futuro de Diego Martínez en el Espanyol es cada vez más oscuro. La derrota en Montilivi, la cuarta consecutiva, no tendrá consecuencias drásticas, aunque el técnico gallego ha agotado ya todo el crédito que le restaba. La afición, su principal avaladora, hace ya jornadas que clama por un cambio de capitán antes de que el barco zozobre del todo. Y Chen Yansheng parece dispuesto a satisfacer sus demandas antes de que el ‘marrón’ le salpique a él. En el último partido en el RCDE Stadium contra el Celta de Vigo ya se escucharon más de dos cánticos contra la directiva.
El propietario asiático tiene decidido destituir a Diego Martínez si el equipo cae la próxima semana contra el Athletic Club en casa. El empresario chino ya ha demostrado que no le tiembla el pulso a la hora de cargarse entrenadores, como ya demostró la temporada del descenso a Segunda. Sin embargo, un nuevo tropiezo tendría consecuencias todavía más drásticas. Yansheng estaría dispuesto a echar de una tacada a Domingo Catoira, director deportivo, e incluso a Mao Ye, su hombre de confianza que desempeña labores de consejero delegado en el club blanquiazul.
Diego Martínez y la cúpula deportiva tienen así una bola extra para preparar el encuentro ante el Athletic Club como si de una final se tratara. Los bilbaínos llegarán a Cornellà, quizás heridos o quizás con ganas de festejar tras la resaca copera de las semifinales ante Osasuna.
