Aunque durante años el periodista Simon Kuper escribió sobre fútbol -de hecho, sobre el deporte rey ha escrito varios libros y también varios artículos sobre el Barça y su admirado Johan Cruyff-, ahora escribe columnas generalistas en el ‘Financial Times’.
De hecho, ha escrito recientemente en el diario británico sobre la necesidad (o no) de gastar más en armamento, además de un ensayo sobre el exprimer ministro Boris Johnson, por poner solo dos ejemplos.
Ahora, Kuper explica que se ha pasado “un año en Madrid, tratando de entender España”. Y entre sus conclusiones, asegura que, aunque España es en general “el país más habitable del mundo” -apunta que más para “los extranjeros privilegiados que para el español medio”-, “el cambio climático podría ser particularmente devastador aquí“.
Discusión prioritaria
Y añade que, aunque el efecto del cambio climático debería ser una prioridad para los españoles, estos “pasan más tiempo discutiendo sobre la unidad nacional”, recalcando que “el gran trauma moderno de España fue el referéndum ilegal sobre la independencia de Catalunya en 2017″.
Y basa su afirmación en el hecho de que en Barcelona proliferan las banderas catalanas (o “versiones” de ella, sin duda refiriéndose a la ‘estelada‘, la bandera no oficial independentista), mientras que en Madrid proliferan las rojigualdas.
Pero Kuper, que también menciona de pasada la “corrupción política“, asegura que también hay cosas buenas, como que la esperanza de vida de los españoles, que ahora es de 84 años, podría ser “la más alta del mundo en [el año] 2040”.
“España vaciada”
Y aunque otro de los problemas del país es “la España vaciada“, Kuper destaca que el verdadero problema por el que deberían preocuparse ahora mismo los españoles y sus gobernantes son los estragos del cambio climático, sobre todo en el centro de la Península y Madrid, “una ciudad en auge, el Londres de España y una especie de paraíso fiscal” que “ha superado a Barcelona como centro de negocios“.
“La crisis que se avecina en España es el cambio climático […]. El polvo anaranjado en nuestro balcón esta primavera, traído desde el Sáhara, se sintió como un presagio”, escribe Kuper. Y afirma que escribe “junto a un ventilador eléctrico en Madrid, donde las temperaturas han superado los 35ºC durante semanas. Algunas regiones superan los 40º, lo que no es habitable”.
“Norte de África”
Para afianzar su advertencia, asegura que “los campos yermos y agrietados que se ven desde las ventanas del tren parecen del norte de África. La vendimia en Jerez comenzó el 28 de julio, la más temprana en la historia de la región. La desertificación ya afecta a alrededor de una quinta parte del territorio español”.
Y advierte de que “el turismo cambiará gradualmente de la costa sur al hermoso y fresco norte, a medida que el calor del verano se transforma de atracción en amenaza”.