El uruguayo Boston River venció este jueves al venezolano Zamora por 3-1 y tomó ventaja en la serie que enfrenta a ambos equipos por la primera fase de la Copa Libertadores. En el estadio Centenario de Montevideo, el ‘Sastre’ mostró su mejor versión y no decepcionó a quienes lo acompañaron, uno de ellos el presidente de Uruguay, Luis Lacalle Pou, simpatizante de este equipo.
Apenas corrían 23 minutos cuando el defensor Leonard Costa saltó más alto que sus rivales luego de un tiro de esquina y se anticipó a la salida del portero rival para marcar el primero con un potente golpe de cabeza. Dueño del balón, el intratable Cristian Olivera se transformó en un dolor de cabeza para el lateral panameño Alejandro Yearwood y generó dos oportunidades claras que no terminaron en gol por falta de puntería. Así la primera parte se fue con ventaja mínima en favor del local, que en el segundo tiempo volvió a ir al ataque desde que el árbitro marcó el comienzo y rápidamente encontró su premio.
Corrían los 55 minutos cuando el atacante Mathías Acuña celebró el segundo tanto tras dejar sin opciones al portero Carlos Salazar con un potente golpe de cabeza. Diez minutos después, Emiliano Gómez aprovechó otra magnífica jugada de Olivera y empujó el balón para transformar la victoria en goleada y para darle al local una gran tranquilidad pensando en la revancha. Sin embargo, en una de las pocas jugadas de ataque que tuvo el Zamora logró descontar por medio de César Magallán, quien convirtió tras una serie de rebotes que complicaron a la retaguardia del conjunto montevideano.
24 minutos quedaban por disputarse y todo hacía indicar que el visitante se iba a adelantar impulsado por el descuento, sin embargo, fue nuevamente el Boston River el que se lanzó al ataque, aunque también debió sufrir en una jugada en la que el vertical jugó a su favor. Sin más jugadas de peligro, el encuentro finalizó con victoria por 3-1 del conjunto uruguayo, que la próxima semana deberá defender sus dos goles de ventaja en Venezuela mientras el argentino Huracán espera un rival.