El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha instado al Congreso estadounidense a que apruebe de manera inmediata una legislación para adoptar el acuerdo llevado a cabo en septiembre entre trabajadores ferroviarios y operadoras para evitar una huelga ferroviaria que bloquee el país.
“Hago un llamado al Congreso para que apruebe una legislación de inmediato para adoptar el acuerdo entre los trabajadores ferroviarios y los operadores, sin modificaciones ni demoras, para evitar un cierre ferroviario nacional potencialmente paralizante”, ha aseverado el mandatario estadounidense en una misiva difundida por la Casa Blanca.
Según Biden, el acuerdo ha sido aclamado por los líderes sindicales y por los trabajadores como una “resolución justa” de la disputada entre los empleados del transporte ferroviario de mercancías y las empresas de la industria.
No obstante, algunos congresistas –tanto en la Cámara de Representantes como en el Senado– pretenden modificar el acuerdo para mejorarlo, ya sea para la mano de obra como para la gestión, lo que está atrasando que ambas cámaras ratifiquen el pacto.
“Por bien intencionado que sea, cualquier cambio correría el riesgo de demorarse y un cierre debilitante. El acuerdo fue alcanzado de buena fe por ambas partes”, ha remachado el presidente estadounidense.
El acuerdo proporciona un aumento salarial del 24 por ciento para los trabajadores ferroviarios y brinda mayores beneficios para el cuidado de la salud. Además, ofrece la posibilidad de que los trabajadores artesanales se tomen días libres no programados por necesidades médicas.
En tanto, y después de que todas las partes se hayan manifestado en favor del acuerdo, el inquilino de la Casa Blanca ha advertido que retrasar la ratificación podría llevar a un cierre ferroviario que devaste la economía estadounidense.
“Sin el tren de carga, muchas industrias estadounidenses cerrarían. Mis asesores económicos informan que hasta 765.000 estadounidenses, muchos de ellos trabajadores sindicalizados, podrían quedarse sin trabajo solo en las primeras dos semanas. Las comunidades podrían perder el acceso a los productos químicos necesarios para garantizar agua potable limpia. Las granjas y ranchos de todo el país podrían no poder alimentar a su ganado”, ha subrayado Biden.
“Como presidente orgulloso de los trabajadores, soy reacio a anular los procedimientos de ratificación y las opiniones de quienes votaron en contra del acuerdo. Pero en este caso, donde el impacto económico de un cierre perjudicaría a millones de trabajadores y familias, creo que el Congreso debe usar sus poderes para adoptar este acuerdo”, ha agregado.
El presidente de Estados Unidos ha señalado que “este” es un “momento crítico” para la economía del país, justo en vísperas de la temporada navideña, motivo por el que “no se puede permitir que la firme convicción de dar mejores resultados para los trabajadores les niegue los beneficios del trato que alcanzaron y arroje a esta nación a un cierre devastador del transporte ferroviario”
“El Congreso tiene el poder de adoptar el acuerdo y evitar un cierre. Debe dejar de lado la política y la división partidista y cumplir con el pueblo estadounidense. El Congreso debería enviar este proyecto de ley a mi escritorio con bastante anticipación al 9 de diciembre para que podamos evitar interrupciones”, ha añadido.
