PARÍS.- Rompiendo la ambigüedad que mantenía hasta ahora frente a la presión del resto de Europa, Alemania anunció hoy que “no se opondrá si Polonia solicita autorización para entregar tanques de combate Leopard”, de fabricación alemana, a Ucrania.
“Alemania no se opondrá a Polonia, si nos lo solicitara”, dijo la ministra de Relaciones Exteriores alemana, Annalena Baerbock, durante una entrevista a la cadena francesa LCI. Al advertir que aún no hubo pedido oficial de Varsovia, la ministra respondía así a la insistencia polaca de poder entregar sus tanques Leopard a Kiev, que, por ser de fabricación alemana, deben recibir la autorización de Berlín para ser enviados a un tercer país.
Una fotografía tomada el 10 de septiembre de 2022 y publicada por el Servicio de Prensa del Ministerio de Asuntos Exteriores de Ucrania, muestra al ministro de Asuntos Exteriores ucraniano, Dmytro Kuleba, y a su homóloga alemana, Annalena Baerbock, asistiendo a una rueda de prensa conjunta en Kiev, en medio de la invasión militar rusa de Ucrania. (HANDOUT/)
Francia y Alemania celebraron hoy el 60º aniversario del Tratado del Elíseo, que selló la reconciliación entre ambos países, con la visita del canciller Olaf Scholz y todo su gabinete a París. La ocasión, propicia para dejar atrás las tensiones bilaterales que marcaron los últimos meses, adquirió importancia por la persistente resistencia de Scholz a autorizar la entrega a Ucrania de esos tanques de combate fabricados por su país. Y si bien la respuesta del jefe de gobierno alemán se mantuvo ambigua, su ministra de Relaciones Exteriores fue mucho más explícita.
Hace semanas que Kiev pide a los occidentales el envío de esos tanques de asalto, que, afirma, le permitirán organizar una verdadera contraofensiva y recuperar los territorios ocupados por Rusia, antes de que las tropas del Kremlin lancen un nuevo y masivo ataque en los próximos meses.
Las declaraciones de Baerbock se producen dos días después de una reunión de más de 50 países en la base estadounidense de Ramstein, en Alemania. Los aliados de Kiev anunciaron un sustancial envío de armamento a Ucrania, pero no consiguieron llegar a una posición común sobre el envío de los tanques de combate.
Poco antes, Gran Bretaña había sido el primer país en dar su acuerdo, anunciando el envío de 14 tanques pesados Challenger en las próximas semanas. Por el contrario, Estados Unidos se ha negado hasta ahora a entregar a Kiev sus blindados M1 Abrams, argumentando su excesiva sofisticación y costo operativo. Francia también se ha negado a deshacerse de sus tanques Leclerc, invocando –entre otras razones– la necesidad de mantener la capacidad defensiva de su ejército, teniendo en cuenta que su remplazo podría tomar décadas. Alemania, por fin, cuyo Leopard se ha fabricado en forma masiva (unos 2000 ejemplares disponibles) y es utilizado por 12 ejércitos europeos, se negó a su vez invocando la necesidad de dar ese paso en forma coordinada con sus aliados.
En esta imagen de archivo, el canciller de Alemania, Olaf Scholz, se dirige a los soldados delante de un tanque Leopard 2 luego de unas maniobras militares en Ostenholz, Alemania, el 17 de octubre de 2022. (Moritz Frankenberg/dpa vía AP, archivo)
“La forma en que hemos actuado hasta ahora es en coordinación estrecha con nuestros amigos y aliados. Y continuaremos haciéndolo en función de cada situación concreta”, dijo hoy Scholz en un claro mensaje, sobre todo a Estados Unidos.
La razón de esa resistencia –tanto de Alemania como de la Casa Blanca e incluso de París– reside en el temor de los grandes aliados occidentales de Ucrania de ser considerados “cobeligerantes” por Rusia, a partir del momento en que esos tanques de combate, que no son necesariamente defensivos, lleguen a manos de Kiev.
Tres semanas después del anuncio del envío de “tanques livianos” franceses AMX 10-RC, el ministro de Defensa francés, Sébastien Lecornu, recordó esta semana los criterios fijados por el presidente Emmanuel Macron para cada entrega de armamento a Ucrania. El primero de ellos, que resume perfectamente la posición común de los occidentales, es “la lógica defensiva para el control de la escalada”.
Desde el comienzo de la ofensiva rusa, en febrero pasado, los gobiernos aliados están extremadamente atentos a no alimentar esa escalada. Por esa razón Estados Unidos también se negó hasta ahora a enviar a Kiev misiles de largo alcance capaces de golpear territorio ruso en profundidad, o aviones cazabombarderos. La misma razón es válida para los tanques del tipo Leopard, aunque esta noche nadie excluía ya que el gobierno ucraniano podrá recibirlos en poco tiempo. En las últimas horas, algunas fuentes militares afirmaban incluso que dos o tres ejemplares de esos blindados ya estarían en manos de Kiev, a fin de comenzar el entrenamiento de sus tanquistas.
Un miembro de las Fuerzas de Defensa Territorial de Ucrania sostiene un arma antitanque NLAW en las afueras de Kiev, Ucrania, el miércoles 9 de marzo de 2022 (Efrem Lukatsky/)
En los últimos días, muchos países, en el seno mismo de la OTAN, no ocultaban su indignación ante las idas y venidas de Berlín. El primer ministro polaco, Mateusz Morawiecki, había calificado hoy de “inaceptable” la posición alemana.
“Es una actitud inaceptable. Hace casi un año que la guerra comenzó. Inocentes mueren cada día. Las bombas rusas provocan desastres en las ciudades ucranianas. Atacan objetivos civiles, asesinan mujeres y niños”, dijo.
Polonia está dispuesta a enviar 14 Leopard a Kiev y trata de coordinar con un grupo de 15 países que harían lo mismo. En caso de negativa de Berlín “organizaremos una pequeña coalición dispuesta a entregarle a una Ucrania en dificultad los equipamientos y tanques modernos que necesita”, agregó Morawiecki, cuando aún no se conocía la declaración de la ministra alemana. Kiev solicita alrededor de 200 de esos blindados pesados.
El sábado, los tres ministros de Relaciones Exteriores de los países bálticos también habían exhortado a Berlín “a entregar cuanto antes los tanques Leopard a Ucrania”.