Esta temporada, el gol en el Barça Atlètic lo ha protagonizado Víctor Barberà. El delantero, con 8 goles, es el máximo artillero del filial azulgrana y su meteórico ascenso lo ha convertido en uno de los activos más valiosos de la cantera del club.
A pesar de que Víctor Barberà todavía tiene ficha del juvenil -aún luce el dorsal 29 en su camiseta- y que en principio tenía que ser el suplente de Roberto Fernández, el delantero de 18 años acumula ocho goles con el Barça Atlètic y se ha convertido en uno de los máximos realizadores de la categoría.
Desde sus inicios, el ariete ha destacado por su innato olfato goleador. Con 14 años, Víctor ya empezaba a dar pequeñas muestras de su gran capacidad en el Sant Gabriel y, a posteriori, en la Damm, donde estuvo solo una temporada. Fue entonces cuando llamó la atención del Barça, quien lo incorporó al Juvenil B de la cantera azulgrana.
Sus inicios como azulgrana
Su primera temporada en ‘Can Barça‘ fue su carta de presentación al fútbol base de más alto nivel. El delantero consiguió anotar 11 goles en 16 partidos de titular en su temporada de debut como azulgrana y le sirvió para dar el salto al Juvenil A.
Sin embargo, a pesar de la innata facilidad para anotar de Barberà, el cuerpo técnico consideró que el delantero podía pulir aún más su capacidad técnica en su etapa de formación. Fue entonces cuando coincidió con Óscar López, el entrenador que le hizo dar el gran salto como jugador. Pulió el diamante en bruto.
En su etapa en el Juvenil B, el técnico diseñó un plan específico para que el delantero perfeccionase su técnica y pudiese mejorar su rendimiento fuera del apartado goleador. Solamente un año después, el trabajo de Óscar, y de su staff, dio sus frutos.
El gran salto de Barberà
Víctor Barberà vivió su mejor temporada en el Juvenil A donde anotó 22 goles en 26 partidos. Con 17 años, el barcelonés empezó a ser señalado no solo como uno de los baluartes de la cantera, sino que su nombre empezó a sonar entre los ojeadores de muchos clubs de Europa que están pendiente de los que se cocina en Can Barça.
Víctor Barberá, relegado al banquillo en los dos últimos partidos
| Javi Ferrándiz
El Barça lo premió con el ascenso al Barça Atlètic a la temporada siguiente, aunque lo hizo sin haber renovado su contrato. Con el filial y en la Youth League, Barberà prosiguió demostrando su facilidad goleadora. El Brujas, que ya había fichado a otro goleador culé como Jutglà, se avanzó en unas negociaciones con las que se lo llevarán de la Ciutat Esportiva.
Barberà, en solo cinco años, ha vivido una explosión sin igual. Pasó del Sant Gabriel al profesionalismo gracias a su olfato goleador y a la labor, muchas veces oscura, de algunos entrenadores en Can Barça.
