CARTHAGE, Carolina del Norte, EE.UU. (AP) — Decenas de miles de personas se preparaban el lunes para pasar varios días sin electricidad en un condado de Carolina del Norte, donde las autoridades dijeron que dos subestaciones eléctricas fueron baleadas por una o más personas con aparentes fines criminales.
En el condado de Moore, muchos negocios y restaurantes tuvieron que cerrar en una época en la que los turistas y compradores navideños suelen llenar los estacionamientos, que ahora se encuentran vacíos. Otros estaban dando alimentos o café gratis, o pudieron operar realizando transacciones en efectivo.
El condado, ubicado a unos 95 kilómetros (60 millas) al suroeste de la capital estatal Raleigh, anunció que las escuelas estarían cerradas el martes, por segundo día seguido.
La compañía Duke Energy ha restablecido la electricidad a unos 9.000 clientes luego de que un máximo de 45.000 clientes se quedaron sin luz en el condado de unos 100.000 habitantes. Jeff Brooks, portavoz de Duke, dijo que la recuperación será gradual y que “una reparación bastante sofisticada con algunos equipos bastante grandes” continuará hasta el jueves.
El gobernador Roy Cooper dijo que investigadores estatales y federales “no están dejando piedra sin levantar en esta investigación para encontrar a los responsables”.
“Proteger la infraestructura crítica como nuestro sistema eléctrico debe ser una prioridad absoluta”, declaró Cooper en una conferencia de prensa. “Este tipo de ataques plantea un nuevo nivel de amenaza. Estaremos evaluando formas de trabajar con nuestros proveedores de servicios públicos y nuestros funcionarios estatales y federales para asegurarnos de que reforzaremos nuestra infraestructura donde sea necesario”.
El jefe policial del condado de Moore, Ronnie Fields, declinó comentar el lunes sobre el incidente, y sólo dijo que el daño fue provocado por disparos. Pero quienquiera que fuera el responsable, señaló, “sabía exactamente lo que estaba haciendo para… causar el apagón”.
En tanto, los semáforos no servían en todo el condado. Los automovilistas utilizaron las intersecciones como paradas de cuatro altos, causando atascos de tránsito en sitios como el centro de Carthage.
Noah Hartford, un estudiante de ingeniería civil en la Universidad Comunitaria de Sandhills, dijo que su familia ha tenido problemas para mantenerse calientes desde que se les fue la luz en su hogar de Aberdeen. Las temperaturas cayeron por debajo del punto de congelación a primera hora del lunes, y se esperan mínimas de alrededor de 4 grados Celsius (40 °Fahrenheit) durante la semana.
“Hace mucho frío”, dijo Hartford, de 18 años, mientras se calentaba junto a una hoguera en la cercana localidad de Southern Pines. “Sólo estamos mi madre, mi hermano y yo. Tenemos fuego y otras cosas afuera y una chimenea, pero realmente esperamos recuperar pronto la calefacción.”
Kalai y Christine Balutski de Pinebluff estaban el lunes sentados debajo de un calefactor, tomando bebidas calientes en el café Red’s Corner en Southern Pines. La pareja lleva desde las 7 p.m. del sábado sin electricidad y están yendo al condado vecino para comer en restaurantes y ver deportes por televisión, a la espera de actualizaciones.
“Tenemos dos perros en casa, así que no podemos simplemente irnos”, expresó Kalai Balutski. “Tenemos un cargador portátil para los teléfonos”, añadió.
Con su abrigo de los Steelers de Pittsburgh, su gorra y sus botas, Christine Balutski dijo que ha tenido dificultades para seguir trabajando en su empleo como asistente de tecnología para un sistema hospitalario, ya que no tiene WiFi en casa.
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Hannah Schoenbaum participa en el programa Associated Press/Report for America Statehouse News Initiative. Report for America es un programa sin fines de lucro que designa periodistas a temas de poca cobertura.
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Gary D. Robertson contribuyó desde Raleigh, Carolina del Norte.