Vuelve la Champions, vuelve la magia de Europa. Hoy arrancan las semifinales de la máxima competición continental con el plato más fuerte: un Chelsea-Barça en el mítico Stamford Bridge (13.30h, TV3, Dazn, TVE). Un partido que promete espectáculo y que será una batalla de estilos: el juego de posición contra el juego de transiciones.
Ambos equipos vuelven a verse las caras después de aquella tarde de 2021 en Göteborg que siempre será recordada por toda la afición azulgrana como el día en el que el Barça alzó por primera vez la Champions.
El resultado fue un abultado 0-4 por parte del equipo que entonces dirigía Lluís Cortés, con todos los tantos anotados antes del minuto 37. Marcaron Leupolz (en propia), Alexia (de penalti), Aitana (MVP de la final) y Hansen. Sin embargo, y en sólo dos años, las cosas son muy diferentes, especialmente por parte del Chelsea.
La fuerte apuesta de Inglaterra por el fútbol femenino ha afectado positivamente a los clubes, que cuentan con una liga más competitiva y más ingresos provenientes de derechos, imagen, patrocinios y, por supuesto, entradas.
UN CHELSEA MÁS MADURO
El conjunto ‘blue’ fue primero del grupo ‘de la muerte’ en el que también estaban PSG y Real Madrid. Y en los cuartos de final acabó con la buena racha europea del Olympique de Lyon, con un gol desde los once metros en el último minuto para poner el empate en la eliminatoria y ganar, finalmente, en la tanda de penaltis.
Se trata de un equipo con una gran potencia a nivel ofensivo, con jugadoras diferenciales en el rombo del ataque como Sam Kerr (punta), Lauren James y Guro Reiten (extremos) y Erin Cuthbert (mediapunta). Son prácticamente infalibles en las transiciones rápidas y las contras y el Barça deberá estar muy atento para no conceder ni media ocasión peligrosa.
APROVECHAR LA FRAGILIDAD DEFENSIVA
Su punto débil, sin embargo, es la fragilidad defensiva. El Barça tendrá que sacar partido de que Millie Bright ni Buchanan, las dos centrales titulares, se perderán el duelo por lesión. Jonatan Giráldez reconoció en la previa que “en el fútbol no siempre gana el que más genera sino el que es más efectivo”, y que han trabajado justamente en eso en los últimos días.
La mejor manera de aprovecharlo será a partir de la velocidad de Hansen y Rolfö, en un partido en el que Mariona podría regresar a la titularidad después de la lesión para ayudar en el juego interior y dejar toda la banda izquierda para la sueca. Y también, con el balón parado, gran aliado del conjunto azulgrana esta temporada, ‘habituado’ a los goles desde lejos de Mapi León, experta ya en lanzamientos de falta.
Eso sí, la central aragonesa tendrá que estar, junto a Irene Paredes, con todos los sentidos puestos para cubrir a las laterales en las contras. El Barça juega con Rolfö y Bronze muy avanzadas y, por este tipo de juego, los grandes equipos lo aprovechan para ganarles la espalda. Y aquí es crucial el papel de las centrales.
LAS LESIONES, UN PUNTO COMÚN
Ambos equipos se han visto perjudicados esta temporada por las bajas. Además de la ausencia de Fran Kirby, Emma Hayes tampoco podrá contar, todavía, ni con Millie Bright ni con Buchanan. Eso sí, Pernille Harder, una de las futbolistas diferenciales del Chelsea y una amenaza en la final de 2021, regresó en el último partido después de una larga lesión, aunque en principio todavía no está para jugar de inicio.
Giráldez tendrá, por fin, a casi todas las jugadoras disponibles, con Pina y Oshoala ya recuperadas. Solo quedará Alexia, que será una más en la grada.