La realidad financiera del Barça impide echar pulsos por jóvenes promesas que, antes de la pandemia, había muchas posibilidades de ganarlos. El último caso de talento que no llegará a la Ciutat Esportiva es el del ecuatoriano Kendry Páez, lo que ha dolido mucho internamente en la secretaría técnica porque se manejaban muy buenos informes de este centrocampista zurdo ofensivo que apunta a figura.
, ha tirado la casa por la ventana y ha llegado a un acuerdo de traspaso con el Independiente del Valle (el vigente campeón de la Recopa y la Copa Sudamericana) por 20 millones de euros por un medio que, actualmente, tan solo tiene 15 años y que es el ‘10’ de su selección en el Sudamericano Sub-17. El futbolista solo podrá aterrizar en la Premier League en el verano de 2025 cuando haya cumplido la mayoría de edad.
Los ‘Blues’ van a por todas en Sudamérica y, en enero, se hicieron con otro objetivo blaugrana, el mediocentro brasileño, Andrey Santos, de 18 años, a quien han dejado en el Vasco da Gama hasta el próximo verano (en mayo estará en el Mundial Sub-20 en Argentina) y, por el cual, pagaron 13,5 millones de euros.
