Los vehículos e instrumentos de la Dirección General de Tráfico son dispositivos diseñados para realizar un control del tráfico. Gracias a estas herramientas, el organismo se asegura de que los conductores respeten las señales de tráfico, que circulen con moderación y que no causen ningún perjuicio a otros conductores.
En este contexto, los radares invisibles y los coches camuflados son algunos de los dispositivos de la DGT que más preocupan a los conductores. Aunque todos los ciudadanos deben respetar las normas de tráfico para evitar ser multados y no poner en peligro sus vidas y las de los demás, son muchos los que todavía se permiten el lujo de hacer caso omiso a alguna indicación de tráfico como las señales o los límites de velocidad.
Así son las furgonetas blancas que más temen los conductores
Las furgonetas blancas que son el terror de los conductores consiste en vehículos que pueden multar con hasta 600 euros si se las adelanta por encima de la velocidad permitida y con 80 euros de sanción si tu mascota no va bien atada dentro del coche.
Estas furgonetas se disponen a lo largo de la carretera: circulando o estacionadas en los arcenes y son de color blanco. Aunque hay que respetar siempre las normas de tráfico, es importante conocer la existencia de un endurecimiento por parte de la DGT de los mecanismos para controlar su correcto cumplimiento.
Las características que permiten identificar estas furgonetas son, además del color, la matrícula que tienen y que incluye el acrónimo PGC que identifica a los vehículos de la Dirección General de Tráfico.