Una jirafa alcanza con su lengua las hojas de un árbol en el zoológico de la ciudad de Oklahoma. Con cerca de 50 centímetros, la negra lengua de las jirafas es una de las más largas del reino animal.
Además de usar esta para obtener comida, también la emplean hábilmente como un instrumento de para acicalarse con el que puede limpiarse desde la orejas hasta arrancarse las espinas clavadas en su piel.
Presenta un color negro por que pasa la mayor parte del tiempo con ella fuera de la boca y una pigmentación de alto contenido en melanina le proporciona protección ante la radiación del sol.