Manos de oro en los dos grandes

Si no pasa nada extraordinario, Ter Stegen y Courtois serán los encargados de defender la portería de Barça y Real Madrid en el próximo clásico del 5 de abril en la vuelta de la semifinal de la Copa del Rey en el Spotify Camp Nou. Sus manos pueden ser igual o más decisivas que cualquier pie de centrocampista o delantero.

Solo hay que ver cuán decisivos han sido los dos para sus respectivos equipos esta temporada. El alemán y el belga están muy consolidados en las porterías de los dos grandes españoles y se unen a una larga lista de guardametas emblemáticos de Barça y Madrid a lo largo de su historia.

Los dos equipos han forjado su leyenda con entrenadores, sobretodo el Barça, y atacantes pero no hay que minusvalorar una serie de guardametas legendarios que ayudaron a ganar títulos y, a su manera, marcar también una época.

Los primeros

En los años 50, Ramallets fue el gran portero del Barça. Consiguió cinco Zamoras y se ganó su apodo de ‘el gato de Maracaná’ por sus brillantes actuaciones con España en el Mundial de Brasil. Consiguió 17 títulos vistiendo de azulgrana.

En aquella época, en el Real Madrid brillaba Juanito Alonso. Fue uno de los pilares del equipo madridista que consiguió cinco Copas de Europa.

Más tarde defenderían la portería de los dos grandes históricos como Sadurní, considerado uno de los mejores porteros en los años 60 y 70 y Vicente ‘El Grapas‘. Los dos ganaron tres Zamoras. Después de ellos dos ya llegaron Pello Artola en el club azulgrana y Miguel Ángel en el madridista.

También tienen un Zamora en el palmarés. Artola fue titular durante ocho temporadas, hasta la llegada de Urruti. El legendario Miguel Ángel estuvo dos décadas en el Madrid y fue titular durante una. En los primeros años coincidió con porteros como Betancort y García Remón.

Porteros legendarios de Barça y Real Madrid

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Las parejas que siguen

A finales de los 80 y los 90, el Barça y el Real Madrid tuvieron mucha estabilidad en la portería gracias a dos enormes porteros: Andoni Zubizarreta en el Camp Nou y Paco Buyo en el Santiago Bernabéu. El vasco, pura sobriedad; el gallego, más espectacular. Los dos, un seguro de vida.

Después de Zubizarreta, el Barça fue encadenando porteros con mayor o menor suerte pero no pudo consolidar a otro guardameta durante años hasta la llegada del gran Víctor Valdés, que igualó a Ramallets con cinco Zamoras y fue el portero en tres finales de Champions. En la de París ante el Arsenal fue decisivo.

De la misma época que Valdés, en el Real Madrid deslumbraba Iker Casillas. Solo Raúl le supera en número de partidos jugados con el equipo madridista.

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