“Han violado la inmunidad parlamentaria”. Así se ha pronunciado el ‘expresident’ de la Generalitat y eurodiputado de Junts, Carles Puigdemont, desde el Parlamento Europeo, tras la detención de Clara Ponsatí por parte de los Mossos d’Esquadra. Puigdemont ha comparecido acompañado del también eurodiputado Toni Comín, que ha denunciado que se trata de una “detención ilegal” y ha acusado al juez del Tribunal Supremo, Pablo Llarena, de “desobedecer” e “insubordinarse” a la legislación europea.
Ponsatí ha vuelto este martes a Cataluña, a través de la frontera de Perpinyà, y sin entregarse a las autoridades del Estado, por lo que ha sido detenida por los Mossos d’Esquadra. La eurodiputada de Junts tenía en vigor una orden de detención, a pensar de disfrutar de inmunidad europarlamentaria cautelar concedida por el Tribunal de Justicia de la Unión Europea. Tras la reforma del Codigo Penal y la derogación de la sedición, Ponsatí solo está acusada de desobediencia. Se trata de un delito que no comporta pena de cárcel, por lo que quedará en libertad.
Puigdemont y Comín consideran que está inmunidad europea tenía que impedir su detención, por lo que han acusado a los Mossos -que en este caso actúan de policía judicial a las órdenes del Supremo- de practicar una “detención ilegal”. Además, Comín ha avisado de que si Ponsatí no puede acudir este miércoles al Parlamento Europeo, donde hay sesión plenaria, Llarena estará “vulnerando el derecho a la representación política de un millón de catalanes”.
En las mismas declaraciones dentro de la Eurocámara, Puigdemont ha calificado el movimiento de Ponsatí de “confrontación inteligente”. Asegura que no se ha “contradicho” y que ha dejado en evidencia “la carencias democráticas” del Estado español. Además, ha asegurado que la vuelta de Ponsatí ha sido “contando con el exilio y no de espaldas al pueblo de Cataluña”, un mensaje que puede ser interpretado como un dardo contra ERC, ya que la consellera Meritxell Serret pactó con el Supremo su vuelta.
También ha pedido a la presidencia del Parlamento Europeo que “no mire hacia otro lado” después de la detención de una de sus parlamentarias. La Eurocámara aceptó el suplicatorio retiró la inmunidad de los tres parlamentarios de Junts, pero los tribunales se la devolvieron a forma cautelar.