Durante una hora el Mirandés superó con claridad al líder de la tabla, venciendo al Eibar por dos a cero con dos golazos sensacionales de Raúl y Gelabert, pero los armeros empataron a dos en un parpadeo y acabaron sellando su remontada con un hermoso tanto de Jon Bautista. Noche de golazos, pero con final amargo para un Mirandés que dio la cara ante el líder pero que tuvo que rendirse al final ante la fenomenal segunda mitad de los guipuzcoanos.
La visita del líder no trastocó los planes de Joseba Etxeberria, con la única novedad de Roberto López en el once respecto al alocado 3-4 de Gijón. Ya desde el inicio se veía el cuajo del equipo armero, con un sólido 4-2-3-1 y queriendo plantar sus reales en la medular desde el primer compás de la noche en pos del control del centro del campo.
Bien ubicado y dinámico el Mirandés en sus salidas buscando las alas, el partido se movía en sus primeras instancias con mucho ritmo en Anduva, llegando la primera ocasión local a los ocho minutos en el centro de Juanlu para el remate de cabeza de Raúl, al que contestaba Luca Zidane con una vistosa palomita. Buena foto.
Sin un dominador claro, eran más verticales las llegadas de los locales como en un centro raso de Pinchi que blocaba Luca adelantándose a Roberto López, o un remate forzado de Salinas en el segundo palo. En respuesta, la primera llegada del Eibar con peligro, a los 19 minutos, se traducía en un centro raso de Bautista que buscaba a Stoichkov en el segundo palo, con corte providencial de Barbu. Se volcaba el líder, con un disparo de Sergio en carrera que desviaba Pinchi saliendo el cuero por encima del travesaño en una gran oportunidad de los vascos.
Pero a los 23 minutos, la dinámica de ida y vuelta se plasmaba en el uno a cero con un golazo extraordinario. Raúl García de Haro recibió el cuero, entró en el área, con un dribling magistral recortaba sentando a dos defensas armeros a la vez y definía con clase, derechazo rasito y colocado junto al palo imposible para Zidane, pase a la red y euforia en Anduva. El joven delantero de Olesa de sigue creciendo de manera exponencial, su gol número trece de la campaña.
Con el marcador a favor se soltaron los peloteros del Mirandés de medio campo hacia adelante, pudiendo ampliar el propio Raúl antes de la media hora en dos remates, uno salvado por Luca a córner y el otro fuera por poco en el mismo servicio desde la esquina. Totalmente ´on fire´ el ariete de los jabatos, con un Mirandés que desde el 1-0 se comía al líder.
Pero el Eibar se puso las pilas con un intento de Stoichkov y un remate con la testa picado de un viejo conocido como Yanis Rahmani que salía alto pero era anulado por fuera de juego. No había tregua en Anduva, y justo antes del intermedio llegaba el dos a cero en otro gol antológico del CD Mirandés. Gelabert entró en carrera, tocó a Raúl, y el nueve le devolvió un pase picado por encima de la zaga vasca para que Gelabert tocara suave ante la salida de Luca por encima del cancerbero, sutil vaselina para completar otra obra de arte. Poesía rojilla en el Día Internacional del arte de la rima y la lírica, llegando el descanso más feliz de la temporada en el feudo ferroviario.
Reacción armera
Apretaba de salida el Eibar en la segunda mitad pero el Mirandés no perdía los nervios entrando en el encuentro con aplomo. Así, apenas a los seis minutos tenía el tercero Pinchi en un remate desde cerca algo forzado que se perdía por línea de fondo tras una gran acción de Juanlu por el perfil diestro del ataque. Y al minuto repetía el carrilero tras una hermosa combinación del Mirandés en la ofensiva, remate final de Gelabert que entre Luca Zidane y su zaga sacaron con apuros. Y es que estaba cada vez más cómodo el conjunto de Joseba Etxeberria, trabajador en defensa y fluido en ataque.
Tras este gran arranque de los rojillos de nuevo el Eibar pasaba a controlar, de entrada con llegadas tímidas sobre todo a través del balón parado en las botas de Arbilla, pero recortando el tanteo a la hora de juego cuando Bautista percutía por la izquierda y su centro raso lo remataba Aketxe a la red por debajo del cuerpo de Herrero. Nuevo decorado en el partido, y mazazo dos minutos más tarde cuando Yanis Rahmani recibía, entraba en diagonal, pared con Bautista y remate del exmirandesista a la red. Pidió perdón el francoargelino, pero la realidad era que con su gol había fulminado la ventaja jabata en apenas un pestañeo.
Trató de contestar Salinas por la vía rápida en una jugada muy rápida, pero su chut se iba por encima del travesaño. Susto poco después en una falta cerca del vértice del área que puso Aketxe con error de Alfonso Herrero en la salida, acabando el esférico en córner. Jon Bautista metía miedo en cada pelota que tocaba, atravesando los locales su peor momento de la noche, y así a quince del final el ariete guipuzcoano recibió en el área y a la media vuelta enganchó un misil a la escuadra, golazo y remontada del líder. Cariacontecido el joven grupo de jugadores jabatos.
En los minutos finales el Mirandés quería pero apenas se asomaba al área eibarresa, con peligro incluso en un testarazo de Nolaskoain que rondaba el dos a cuatro. Al final, acoso sin premio y derrota en un encuentro con dos caras.