España dio un gran salto hacia la igualdad en 2021 al equiparar los permisos de paternidad y maternidad, con 16 semanas cada uno de ellos. Dos años después de aquel hito, los permisos se han consolidado y la mayoría de los padres los disfrutan de forma íntegra. Hasta aquí la buena noticia. Sin embargo, los datos de la Seguridad Social muestran que, el año pasado, el 74% de los progenitores llevaron a cabo el permiso del tirón y a la vez que la madre, en lugar de fraccionarlo y hacerse cargo del bebé durante un tiempo en solitario. Esta tendencia perpetúa los roles de “madre cuidadora y padre ayudante“, según denuncia la entidad impulsora Plataforma por los Permisos Igualitarios de Nacimiento y Adopción (PPiiNA), que entiende que las bajas en solitario contribuyen a fomentar la corresponsabilidad.
Fraccionar el permiso supone hacer nuevos trámites ante la Seguridad Social y volver a negociar con la empresa, cosas que frenan a muchos
Este colectivo agrupa a 150 organizaciones y fue creado en 2005 con el único objetivo de promover permisos igualitarios, intransferibles y pagados al 100%, algo revolucionario hace casi 20 años y que se ha concebido como palanca para revertir la poca conciencia masculina que tradicionalmente ha habido -y hay- alrededor de los cuidados y la crianza. Según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística, el 49,7% de las mujeres aún cargan con la mayor parte de las tareas domésticas, frente al 4,3 % de los hombres que afirman llevar ellos el peso. Los especialistas mantienen que esa desigualdad empieza a fraguarse durante el primer año del bebé: la madre acostumbra a hacerse cargo del recién nacido y la dinámica acaba perpetuándose más allá de la primera crianza.
Los especialistas mantienen que la desigualdad en la crianza se fragua durante los primeros meses: la madre acostumbra a hacerse cargo del recién nacido y la dinámica acaba perpetuándose
Que el padre se ocupe del bebé en solitario en ese momento sensible, por tanto, contribuye a romper roles y estereotipos, insisten los expertos. Sin embargo, la entidad ya denunció que el diseño de los permisos impulsado por el Gobierno contenía “trampas” que podían dificultar que los padres se lleguen a corresponsabilizar íntegramente del cuidado de los hijos en solitario y mientras las madres trabajan. “El tiempo nos ha dado la razón“, estima Cristina Castellanos, coportavoz de la PPiiNA.
Los retrasos detectados a la hora de recibir el sueldo en los permisos fraccionados es otro factor que juega en contra
Las “trampas” que la plataforma denuncia tienen que ver con que la ley obliga a simultanear las seis primeras semanas del permiso del padre y de la madre y con el hecho de que se ha perdido el derecho a disfrutar de la baja a tiempo completo mediante una simple comunicación a la empresa: ahora se requiere una negociación. Es decir, “la ley lanza el mensaje de que está bien que padres y madres cuiden al mismo tiempo, al obligar a las seis semanas de permiso conjunto, cuando en otros países te prohíben simultanear la baja más de un mes, lo que marca la pauta e influye en los cambios sociales“, señala Castellanos.
Las dificultades de fraccionarlo
Además, si los padres quieren fraccionar el permiso y disfrutar las 10 semanas restantes a continuación de la baja maternal -que se suele realizar en primer lugar para favorecer la lactancia-, lo que permite alargar el tiempo del cuidado del bebé a cargo de los padres y sin recurrir a la guardería u otros cuidadores, tienen que hacer un nuevo trámite ante la Seguridad Social y acordar con la empresa si el nuevo periodo de baja se realizará a tiempo completo o parcial.
Acogerse a los permisos fraccionados implica más trámites ante la Seguridad Social y una negociación con la empresa
“Muchos padres, sobre todo los que tienen empleos más precarios, no quieren negociar con las empresas, porque, si disfrutan de la baja del tirón, no hay que hacer nuevos trámites, ni se significan ante sus jefes, son uno más -añade la portavoz de la plataforma-. Sin embargo, si piden fraccionarlo, saben que pueden poner en riesgo su puesto de trabajo, porque para las empresas es más fácil sustituir a un trabajador las 16 semanas de golpe que no en varios tramos”.
Asimismo, al estar los dos cuidadores al mismo tiempo, para las empresas “es más fácil pedir ayuda al padre, aunque sea de manera informal, a través del teletrabajo”. Más allá de estas incidencias, otro escollo es que se están detectando retrasos a la hora de percibir el sueldo en los permisos fraccionados, lo que puede también influir a la hora de decidir disfrutar la baja del tirón.
Todo ello está provocando una especie de estratificación social de los permisos, de manera que aquellos progenitores que tienen trabajos estables, como los funcionarios, tienen más tendencia a dividir el permiso y alargar así el tiempo que los dos padres pueden cuidar del bebé. Mientras, entre los progenitores con empleos más precarios, las 16 semanas se suelen disfrutar de golpe y a la vez que la madre, según los datos recabados por la PPiiNA y por Castellanos, que es profesora de Economía Aplicada en la UNED y forma parte de un grupo de investigación sobre los permisos.
Influencia en la crianza
La experta explica por qué la forma de realizar el permiso por nacimiento influye en toda la crianza. “Los padres que fraccionan el permiso y cuidan durante un tiempo al bebé mientras las madres trabajan aprenden qué implica el cuidado y lo integran en su identidad masculina, desconectan más de sus trabajos y luego, durante toda la crianza, están más dispuestos a flexibilizar sus jornadas laborales para atender a los niños, si es necesario. Por el contrario, los padres que cuidan al bebé a la vez que las madres suelen desempeñar el rol de ayudantes y no salen de este papel tampoco cuando el niño crece”.
Otro escollo es que se están detectando retrasos a la hora de percibir el sueldo en los permisos fraccionados, ya que implican más trámites en un momento de colapso de la Seguridad Social
Por todo ello y ante las reiteradas peticiones de la PPiiNA, el Gobierno incluyó en el acuerdo de coalición que se modificarían “las trabas que dificultan la no simultaneidad de los permisos”. Es decir, que facilitan que padre y madre disfruten de todo el permiso a la vez. Sin embargo, el acuerdo no se ha cumplido.
El PSOE fue el partido que desde el principio impulsó que los dos progenitores tengan que realizar seis semanas de manera conjunta “para diferenciarse políticamente de Podemos“, que se hizo eco de la propuesta de la PPiiNA y defendía que solo se compatibilicen, de manera obligatoria, 15 días. Sin embargo, al llegar al Ejecutivo, Unidas Podemos no ha hecho bandera de este tema y en las conversaciones con la entidad feminista alega que le corresponde al ala socialista eliminar las citadas “trabas”, según denuncia la coportavoz del colectivo.
Y nada indica que la situación se vaya a modificar en el futuro próximo puesto que tampoco se ha incluido ninguna reforma sustancial de los permisos en el proyecto de ley de familias.