El español Carlos Alcaraz, primer favorito, selló este lunes la victoria número 100 de su carrera en el circuito ATP con tan solo 19 años, al imponerse por 7-6(4) y 6-3 al holandés Tallon Griekspoor y clasificarse para los octavos de final del Masters 1.000 de Indian Wells. Los golpeos del holandés Tallon Griekspoor tuvieron un promedio de 125 kilómetros por hora en el primer set, pero Alcaraz supo contener el gran arranque de su rival y se citó en los octavos de final con el británico Jack Draper, verdugo de su compatriota Andy Murray. El murciano, número dos del mundo y primer favorito en el desierto californiano ante la baja del serbio Novak Djokovic, selló la victoria en una hora y 41 minutos. Es el segundo jugador más rápido en alcanzar las cien victorias en el circuito ATP con un balance de 100-32, después de John McEnroe, que lo hizo en un partido menos.
Tras eliminar sin apuros al australiano Thanasi Kokkinakis en su estreno, Alcaraz superó un obstáculo más exigente y volvió a dar buenas señales a nivel físico, después de la lesión en los isquiotibiales que le costó la final del torneo de Río contra el británico Cameron Norrie. El murciano, que alcanzó la primera posición en el ranking con su título en el Abierto de Estados Unidos y es ahora número dos, podrá volver al número uno con un triunfo en Indian Wells, ante la ausencia de Novak Djokovic. El serbio no participa en Indian Wells al no poder entrar a Estados Unidos por su negativa a vacunarse contra el coronavirus.
Alcaraz fue semifinalista el año pasado en ‘Tennis Paradise’ antes de coronarse en Miami con el primero de sus dos Masters 1.000. Ganaría poco después en Madrid, además de Río y Barcelona, y pondría la guinda en Nueva York, cuando levantó al cielo el primer ‘grande’ de su carrera y se convirtió en el número uno del mundo.
Primer set de alta exigencia
Griekspoor tenía claro que necesitaría forzar al máximo sus golpes para poner en apuros a Alcaraz y en el primer parcial el holandés consiguió llevar al límite al murciano. Su derecha tuvo un promedio de más de 130 kilómetros por hora de velocidad y su revés viajaba a una media de 122 kilómetros por hora.
Alcaraz necesitó paciencia y concentración para no frustrarse y no conceder oportunidades con su servicio. Lo hizo con madurez, jugando puntos largos, defendiéndose en el momento de la necesidad, y solventó el primer set en el desempate tras 59 minutos de una auténtica batalla. Firmó un gran revés pasante en el primer punto y se escapó 4-2 con una perfecta dejada, antes de sentenciar el set con un definitivo 7-4.
Fue un golpe psicológico para Griekspoor, que empezó a dar señales de nerviosismo en el segundo set y perdió el saque en el primer turno. Alcaraz salvó dos bolas de rotura con ventaja 2-0 y sentenció el choque con su saque para el definitivo 6-3.
Examen Draper
Alcaraz se medirá ahora con Draper, la gran esperanza del tenis británico, que tumbó en un partido espectacular a su compañero Andy Murray por 7-6(5) y 6-2. El murciano ganó el único precedente con Draper, número 56 del ránking mundial, el año pasado en Basilea, en tres parciales.
Los exjugadores de la NBA, el alemán Dirk Nowitzki, campeón en 2011 con los Dallas Mavericks, y su amigo Steve Nash, estuvieron en el palco de honor viendo el encuentro.