Tres años después de que la pandemia estallara y quedaran en evidencia los problemas de las residencias de mayores y a mes y medio de que se convoquen oficialmente las elecciones autonómicas, el Gobierno de Madrid promete que la región tendrá unas oficinas donde los familiares de las personas que viven en estos centros podrán depositar sus quejas. Es lo que la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, llamó ayer nuevo “servicio de atención y apoyo a las familias en las residencias de mayores”, algo así como un buzón que el Gobierno pone a disposición de los usuarios y que pondrá a la Administración sobre aviso de los conflictos que puedan darse en los 25 centros públicos gestionados por la Comunidad o los18 de gestión indirecta.
Junto a eso, el Gobierno autonómico promete también dar un impulso a los consejos de residencias, que más que como buzón actúan como “órgano fiscalizador” de la gestión de estos centros, según describe Miguel Vázquez, presidente de la Plataforma por la Dignidad de las Personas Mayores en Residencias Pladigmare, quien censura que el Gobierno de la región ha evitado hasta ahora fomentar su creación porque no tenían ningún interés en que los familiares pudieran poner sobre la mesa los problemas que se encuentran en las residencias donde tienen a sus mayores. “No quieren un control y pasan de fomentarlos”, explica Vázquez.
Petición de la oposición
El anuncio que se realiza ahora llega después de que los tres partidos de la oposición de izquierdas, Más Madrid, PSOE y Unidas Podemos, y asociaciones como Pladigmare hayan solicitado un mayor control de la gestión de las residencias, donde se han repetido las denuncias por la calidad de las comidas que se ofrece a los mayores, las condiciones en las que se encuentran o la desatención que algunos lamentan.
El anuncio de la presidenta se produjo ayer precisamente en Alcalá de Henares, donde un día antes se celebró un pleno extraordinario en el Ayuntamiento de la localidad dedicado a la situación de la residencia Francisco de Vitoria y en el que la mayoría de concejales votó a favor de romper el contrato de alimentación para los residentes. Pero antes ha habido también quejas por lo mismo, la nefasta calidad de los alimentos que sirven en estos centros de mayores, en San Sebastián de los Reyes, donde un abuelo denunció haber recibido comida podrida. O en Alcorcón, a donde se trasladó el dirigente socialista Juan Lobato para denunciar el abandono de los ancianos con la consecuente crítica de Ayuso por politizar la situación de las residencias.
El portavoz del área de Más Madrid en la Asamblea, Emilio Delgado, cree que el anuncio del nuevo servicio de la oficina de atención a los familiares son fuegos artificiales de cara a la campaña electoral porque “cada vez que sube el volumen” respecto a las residencias “Ayuso hace algún anuncio” para calmar a sus usuarios. Igual que cuando anunció 150 millones más para las residencias en los presupuestos en plena ofensiva de la oposición en la Asamblea por este asunto o el cheque para los mayores puedan vivir atendidos en sus casas, anunciado hace solo unas semanas. Todo esto, apuntan desde la oposición, son medidas para paliar la mala gestión de las residencias.
Consejos de residencias
“Lo que hace falta es una representación real de familiares en los consejos de dirección de las residencias, no unas oficinas” que entiende Delgado que solo sirven como desahogo para que las familias se quejen pero no serán efectivas porque no tendrán capacidad de influencia real en la gestión diaria de las residencias. “Si existieran estos consejos, la oficina sería innecesaria”, apunta Vázquez. Pero en la Consejería defienden que es solo una medida más para mejorar el servicio y que se hará “un seguimiento” de las incidencias que se reciban.
Los consejos de residentes están recogidos en el Reglamento de Organización y funcionamiento de las residencias de la Comunidad de Madrid de 1993 y Pladigmare, explica su presidente, había solicitado su impulso en todas las residencias de la región apenas un par de meses antes de la pandemia. “Es obligatorio tenerlos, no hace falta convencer a las empresas que gestionan los centros, hay que obligarles”, apunta Vázquez, convencido de que la Consejería no ha querido violentar a las adjudicatarias de estos servicios.
Infrautilizados
Fuentes del departamento que dirige Concepción Dancausa, en cambio, defienden que una cosa es que esos consejos existan y otra distinta que quienes tengan derecho a participar quieran hacerlo y que no pueden obligarles a convocar reuniones ni a que sean activos en ellas. En estos consejos tienen derecho a participar los propios residentes que sean elegidos para tal fin o aquellos “que ejercían la tutela legal de residentes incapacitados judicialmente” para velar por los derechos de todos los mayores que se encuentren en el centro. “En aquellos donde el grado de dependencia de los residentes es muy alto es lógico que la participación sea escasa”, explican desde la Consejería, y ese es el motivo por el que ahora deciden ampliar esa participación a familiares de los residentes.
El portavoz del área de Más Madrid insiste en línea con el responsable de Pladigmare, que la Comunidad no ha tenido hasta ahora “interés” en que estos consejos fueran útiles y por eso han evitado posicionarse cuando se lo han planteado en comisión o pleno y que “no han querido informar de la utilidad” de los mismos. “Tendría que haber consejos en las cerca de 270 residencias (públicas y de gestión privada) de la Comunidad pero solo existen en 26”, denuncia.
Ayuso, además de defender que la Comunidad cuando identifica un problema lo “soluciona”, en referencia a las quejas que han recibido en distintas residencias de mayores, afeó ayer desde Alcalá de Henares que el alcalde de la localidad convocara un Pleno extraordinario a menos de 24 horas de que se celebrara el Consejo de Gobierno en la ciudad. “No veo bien este contexto que se ha fabricado en torno a este Consejo, lo único que se hace es politizar una situación sobre la que por supuesto nos hacemos cargo porque con esto o sin ello estaríamos encima de nuestros mayores”, ha insistido.