De Lewandowski, al poder del equipo

La extraordinaria evolución del Barça deja detalles que sería conveniente que no pasaran inadvertidos, pues confirman el trabajo del equipo técnico y de los propios jugadores a lo largo de estos meses. Es indiscutible que la temporada empezó con una clara dependencia de Lewandowski.

No es que sea malo depender de un crack, pero siempre es mejor basar el éxito en el juego colectivo, de manera que si la estrella falta, por lesión o por sanción, el equipo lo aguante todo. Pues bien, Lewandowski fue expulsado y castigado por tres partidos y el equipo salió al rescate. Pedri y Dembélé se erigieron en los líderes, uno como cerebro y también goleador y el otro como el jugador desequilibrante por el que tanto habíamos suspirado.

Luego llegó la lesión de Dembélé y ahí apareció Raphinha. Gavi, por su parte, ha dado un enorme paso adelante en su nueva posición de falso extremo y hasta Alba y Kessié, saliendo desde el banquillo, lo cual tiene todavía más mérito, sobre todo en el caso del lateral, se han mostrado decisivos. 

LA ACTITUD

Es un hecho que el mejor momento del Barça, esas cinco semanas en las que ha ganado la Supercopa y le ha sacado ocho puntos al Madrid, ha llegado de la mano del juego colectivo. La ausencia de Lewandowski se saldó con tres victorias por 1-0. Dembélé marcó en el campo del Atlético y Pedri ante el Getafe y Girona. Ya con Lewy, al Madrid lo ejecutaron entre Gavi, Pedri y el propio Lewandowski, y en la Copa fue Dembélé quien se cargó a la Real.

El polaco marcó ante el Betis, pero no frente al Sevillla. Para el equipo, es una bendición disponer del poder goleador de Lewandowski y sumarle la consistencia colectiva y la irrupción de nuevos rematadores. Y otro detalle muy importante: la actitud y concentración. Ahí se ha dado otro salto monumental. Recordemos las dos jugadas del pasado domingo en las que a Gavi y Araujo casi les vuelan la cabeza por ir al límite en la disputa del balón. Eso también suma. Y mucho. Tanto, que seguramente es un factor decisivo en la seguridad defensiva del equipo. 

LA CLAVE

El mejor momento del Barça ha llegado de la mano del juego y el compromiso colectivo. 

 

Generated by Feedzy