Ousmane Dembélé estará cinco semanas de baja por culpa de una rotura en el rector anterior de la pierna izquierda. Un percance que podría hacer que se pierda cerca de una decena de partidos. El diagnóstico confirma los peores pronósticos y obliga a Xavi a un cambio de guión. A buscar alternativas a un jugador que condicionaba a su equipo y a los rivales. A uno de esos delanteros capaces de marcar diferencias de forma individual.
Sin Dembélé el Barça se queda sin su gran amenaza ante rivales de bloque bajo, el escenario que más veces emplean ante los blaugrana. También sin un futbolista que da sentido al planteamiento de los cuatro centrocampistas. Sin él, un jugador que rompe con los corsés tácticos, el equipo corre el riesgo de volverse previsible y lineal. Pero, a la vez, su baja supone una oportunidad para delanteros como Ferran Torres, Raphinha o Ansu Fati que no terminan de despegar.
Xavi cuenta con varias alternativas para suplir la baja del francés dependiendo del sistema que use. El primer ejemplo se vio en Montilivi, con la entrada de Pedri por Ousmane. Xavi apostó por Raphinha como extremo derecho. Era el movimiento más natural posible: avanzar la posición de Gavi en la banda izquierda como ya hizo ante el Madrid, y mantener al brasileño en la banda donde se siente más cómodo.
Con Ansu como segundo delantero
En este mismo contexto de cuatro centrocampistas, y pensando que Lewandowski ya está disponible, si el escogido fuera Ansu en lugar de Raphinha, Xavi se vería obligado a un movimiento distinto. En este caso avanzar a uno de los interiores a la banda derecha para que Fati se ubique en su posición natural como extremo izquierdo.
Para los partidos menos exigentes, en el clásico 4-3-3, Xavi podría alinear a los tres delanteros: Raphinha, Lewandowski y Ansu, sacrificando a alguno de los centrocampistas. Las ausencias de Memphis, traspasado al Atlético, y Dembélé, por lesión, invitan a pensar que se incrementará la apuesta por los cuatro centrocampistas por una cuestión de recursos en la delantera.
Ferran Torres con el Barça
| Javi Ferrándiz
A estos tres nombres hay que sumar el de Ferran Torres, un delantero que debería ganar protagonismo en los próximos partidos. Xavi necesita recuperar una versión más competitiva del internacional, que ha regresado del Mundial con problemas de confianza. No ha contribuido a su mejora una sanción que le ha apartado de los últimos partidos ligueros.
Sin Dembélé, tendrá la oportunidad de sumar más minutos y recuperar el nivel de la temporada pasada, donde se convirtió en un revulsivo cuando llegó en el mercado de invierno. También Ansu y Raphinha tienen que dar un paso adelante para suplir la aportación de Ousmane. El regreso de Lewandowski, el gran factor goleador del equipo, tiene que jugarles a favor. En un Barça que se está acostumbrando a ganar por la mínima, el polaco supone el mejor refuerzo posible.