El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado este viernes una inversión adicional de 14,4 millones de euros para combatir el hambre en seis países de África, tres del Sahel y otros tres del Cuerno de África.
Lo ha anunciado durante una visita, junto al ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, y la ministra de Sanidad, Carolina Darias, a la base logística del Programa Mundial de Alimentos de las Naciones Unidas (WFP), en el Puerto de Las Palmas de Gran Canaria.
Allí, tras visitar las instalaciones, ha anunciado que el Gobierno va a reforzar el compromiso de España en la lucha contra el hambre. Para ello, han activado un plan de choque contra la emergencia almientaria, junto con el Programa Mundial de Alimentos, dotado con 14,4 millones de euros.
De esta cantidad, 4,4 millones que se destinarán a la iniciativa de granos desde Ucrania, ampliando así el compromiso de España con un progragama que financia el traslado de cereal ucraniano a países en desarrollo.
Otros 10 millones irán a 6 países africanos: tres del área del Sahel que son Mali, Níger y Mauritania, que recibirán 6,5 millones de euros y otros 3,5 para los países del Cuerno de África, Etiopía, Sudan del Sur y Somalia.
Sánchez ha recordado que España ya había aumentado su contribución a este programa pasando de 4 millones de euros a 13 millones anuales. Y ha destacado que en septiembre pasado, en la Asamblea General de Naciones Unidas, nuestro país comprometió un “esfuerzo importante” de 236 millones en los próximos 3 años para “paliar esta inseguridad alimentaria exacerbada como consecuencia de la guerra de Putin en Ucrania”.
El jefe del Ejecutivo ha querido subrayar la importancia del acto realizado por parte de Naciones Unidas y ha reiterado su felicitación y reconocimiento a todos los trabajadores del programa mundial de alimentos que trabajan en colaboración de la Agencia Española de Cooperación Internacional al Desarrollo, el Cabildo de Gran Canaria y las empresas suministradoras.
En su opinión, hacen una labor “extraordinaria” y por ello les ha expresado el “enorme orgullo por el trabajo” que realizan y la felicitación de toda la sociedad española.
Sánchez ha hecho referencia a un vídeo que se había proyectado minutos antes destacando que miles de niños menores de 5 años pasan hambre mientras que el mundo arroja 1.300 millones de toneladas de alimentos aptos para el consumo a la basura cada año.
El jefe del Ejecutivo se ha referido a la inestabilidad política que viven muchos países, la violencia y la emergencia climática con la sequía que recorta la producción de alimentos como elementos que exacerban la crisis alimentaria.
Regiones cercanas a España sufren la crisis alimentaria
Además ha recordado que la guerra en Ucrania ha desatado una triple crisis que afecta a los fertilizantes, los hidrocarburos y los alimentos. “El impacto lo sufren regiones muy cercanas a las islas Canarias y por tanto a España”, ha señalado, destacando que en el Sahel y en el Cuerno de África millones de personas se enfrentan al hambre cada día.
“Cómo puede ser que en pleno siglo XXI sigamos hablando del hambre en el mundo, cómo es posible que teniendo conciencia de esta realidad no lo podamos solucionar”, ha exclamado Sánchez para quien combatir el hambre es una obligación moral y un mandato de la razón.
Por ello, ha pedido moverse por la humanidad pero también por la inteligencia porque haciéndolo se protege a los ciudadanos en España. Cree que el programa mundial de alimentos es un instrumento único para combatir esta “barbarie silenciosa” y considera un “honor” poder contar con su ubicación en Gran Canaria.
“Lo más decente que un Gobierno puede hacer”
Y tras anunciar la inversión adicional de 14,4 millones para paliar el hambre, se ha dirigido a los embajadores que estaban presentes en el acto para decirles que España va a estar a la altura de esta emergencia alimentaria porque, ha dicho, “representa el multilateralismo de esta iniciativa, lo exige la sociedad española, materializamos el deseo expreso de la sociedad con los países que sufren de manera más intensa la crisis alimentaria y porque es lo más decente que un Gobierno puede hacer”.
Para concluir, ha citado el libro titulado “El hambre”, de Martín Caparrós, en el que se afirma que “ninguna enfermedad, ninguna guerra ha matado más gente, ninguna plaga sigue siendo tan letal y al mismo tiempo tan evitable”.
