CORDOBA.- “Estoy muy agradecida por lo que se ha hecho para rejuvenecer y poner en valor a ‘El Paraíso’”, dice a LA NACION la hija de Manuel Mujica Lainez, Ana Mujica. Las siete casas ubicadas en el predio donde vivió el escritor estaban deterioradas y hacía tiempo que se intentaba recuperarlas. Incluso Mujica en algún momento pensó que debería vender la propiedad.
Biblioteca principal de El Paraíso, la casa de Manuel Mujica Lainez (Diego Lima / LA NACION/)
En febrero del año pasado, La Cumbre fue declarado “poblado histórico nacional” por un decreto presidencial. Catorce millones de pesos fueron girados desde Nación a la ciudad para la puesta en valor no solo de “El Paraíso” sino de la iglesia de Nuestra Señora del Carmen; de la Capilla San Roque; de la Estación del Ferrocarril y de la Sala Luis Berti.
Una talla religiosa del siglo XVII, uno de los objetos recuperados tras un robo ocurrido en febrero de 2014, en El Paraíso (Diego Lima / LA NACION/)
Mujica recuerda que todo empezó cuando Teresa Anchorena presidía la Comisión Nacional de Monumentos, de Lugares y de Bienes Históricos, Carolina Biquard el Fondo Nacional de las Artes (renunció en 2018) y Alberto Mangel era director de la Biblioteca Nacional (también dejó el cargo en 2018).
Manucho en la terraza de la casa en la que habitó en La Cumbre, Córdoba (Facundo de Zubiria/Archivo Revista La Nacion/)
“En diciembre del 2021 Anchorena me llamó para decirme que habían enviado un dinero para la casa museo -repasa Mujica-. También ayudaron mucho Patrimonio de Córdoba y la Municipalidad de La Cumbre para que se concretaran los trabajos”. Se arreglaron los techos, se pintó todo el exterior, se renovaron los hierros de las rejas y toda la carpintería, incluso algunos pisos de las terrazas y las galerías. Una “obra mayúscula”, define e insiste con su agradecimiento.
El refugio serrano donde Manucho pasó sus últimos años
Tres de las casas del predio -La Anita (para ocho personas, US$100 la noche), con el anexo y el loft (para 4 personas, US$50)- están totalmente renovadas y equipadas, y se alquilan a turistas para con esos fondos sostener el museo. Los visitantes, además, pueden disfrutar del jardín y la pileta. Mujica lamenta la muerte hace unos días de Julio Heredia, quien fuera durante 40 años, el responsable del cuidado del parque: “Era el celoso guardián de ‘El Paraíso’, muy difícil de reemplazar”.